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Argentina Argentina · Buenos Aires
Voto de Juan Rúas:
6
Thriller En Chicago, la vida de Sam Phelan (Chris Hemsworth) y su esposa Leslie (Victoria Profeta) cambiará por completo cuando en un golpe de suerte se encuentran con un maletín lleno de dinero en efecitvo. El problema surgirá cuando el hombre que ha perdido la maleta, el extraño y siniestro Pyke Kubic (Sean Bean), quiera recuperar su dinero... (FILMAFFINITY)
8 de enero de 2011
13 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
El riesgo, eso el dinero lo puede comprar. Porque para que Cash mande durante todo su visionado un mensaje tan transgresor y negativo de la raza humana, incluyendo temas como el racismo, la xenofobia post 11-s, la discriminación hacia los judíos y otra gama de aristas similares que agudizando un poco la visión solo sirven para volver un chicle su mensaje aparentemente universal...en fin, para que luego de toda esa demostración de "malas maneras políticas" se termine de manera tan conformista y autocomplaciente resulta poco menos que sobrador.

Es una cinta sobradora, su música inicial ya es su principal síntoma: el chantaje. Y hace luego del chantaje el tema principal de la trama, aludiendo a una universalidad que se codea con la especificidad narrativa: no sabemos hasta que punto la peli pretende denunciar y hasta donde se ha enamorado de su propio argumento. O bien la ambición humana, o bien que hará luego este trío heterogéneo para salir del trance del momento. Al respecto de los tres...hay una buena caracterización de los personajes, siendo muy singular las dos tazas de café que señalan dos caminos y naturalezas distintas de acuerdo a su color (el espectador sabrá de que hablo). Sean Bean, todo el tiempo busca hacerse ver, hasta tiene un doble papel: esta harto de que no lo tomen como un actor en serio. Como Boromir me fascinó, el resto de su filmografía anduvo agarrado con pinzas.
La "Profeta", junto con Hemsworth hacen una pareja un tanto dispareja que intenta sobrellevar lo mejor posible esa tendencia del guión a caminar por las cornisas de la verosimilitud.

Socarrona, con un vuelco siniestro y dramático en su tramo final y con un desenlace irrisorio, Cash es como ese auto que regala dinero. Habrá que comprobar la legitimidad de los billetes que ofrece.
Juan Rúas
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