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Argentina Argentina · Buenos Aires
Voto de Juan Rúas:
7
Drama Adaptación cinematográfica de la "La gaviota", famosa obra de Chéjov. Mado, una famosa actriz, pasa el verano en su casa de campo en la Bretaña, en compañía de su hermano Simon, de su hijo Julien -quien pretende convertirse en un cineasta renombrado-, y de Brice, su actual amante y director de sus películas anteriores. Las relaciones entre Julien y su madre son muy tormentosas y difíciles de llevar. Julien está locamente enamorado de ... [+]
7 de abril de 2010
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
En el cuento "El retrato oval", de Edgar A. Poe, un pintor obsesionado con una mujer pretende retratarla de forma perfecta: esto es, captar su esencia, robársela por así decirlo y plasmarla en un cuadro. Lo cierto es que lo logra, pero le arrebata la vida a la mujer concreta. En La pequeña Lili asistimos no a un robo, sino a la decisión voluntaria de una familia que pretende eternizarse desde sus extrañas costumbres dentro del séptimo arte. Si bien el espíritu trágico se encuentra más matizado, el resultado final termina siendo aberrante.

De entrada la peli juega desde un metatexto constante: lo que vemos es lo que fue filmado no por Miller, sino por la familia misma. El artificio es evidente, puesto que los personajes se ajustan más a "poetas espontáneos" en eterna actitud reflexiva, con diálogos imposibles de concebir por su profundidad literario/intimista con respecto a las relaciones más mundanas que pueden esperarse dentro de una familia de clase acomodada. Ellos ya SON sus personajes.

Y el drama se encuentra armado, porque la promiscuidad familiar se transpira a raudales, a veces llegando a extremos delicados ("incestivamente" hablando). Cada cual con su fuerza contraria va tejiendo esta red de solapada perversión, de afectividad retorcida. Y es que si algo se siente todo el tiempo es esa violencia contenida, disimulada por teorías filosóficas que intercambian los personajes en relación a sus propias vidas.

El guión, o en este caso tan particular el armado ficcional que ellos mismos construyen...pues no está del todo bien calibrado: es cierto que Lili representa el punto de quiebre, pero de ninguna manera se constituye como el eje principal. Porque este personaje desaparece incluso durante una considerable cantidad de tiempo y la familia prosigue con su objetivo, o sea, la historia vive desde otros laterales igualmente importantes. Lili sólo conforma una parte más de una estructura mayor, por eso tampoco considero ajustado el título.

Obra interesante, sobre todo desde los pequeños mundos infernales que se encarga de construir. El espectador puede engancharse desde su vuelo literario, como también puede salir con sabor agridulce frente a ese mundo tan exacerbadamente empaquetado con nudo marinero.
Juan Rúas
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