Este cortometraje al parecer tan raro puede echar para atrás al espectador poco experimentado, pero son 15 minutos de una vida que se desperdicia en cosas mas vanas. ¿ Porque no ver uno de los primeros trabajos de Polanski? Además verlo de joven no tiene precio.

Pero este corto no se queda en una simple experimentacion y mimetización del director con el cine, va más allá.

A pesar de no ser excelente en cuanto a términos cinematográficos se refiere se caracteriza por la metáfora que nos quiere enseñar, donde lo extraño es un estorbo a pesar de ser mejor que algunas cosas cotidianas. Para argumentarlo me tengo que remitir al spoiler.

Pues en definitiva este trabajo del joven Roman no se quedará grabado en nuestras retinas pero si podemos aprender algo como siempre en el cine y para 15 minutos que podríamos pasar viendo anuncios viendo la tele, mejor ver esto que es entretenido y didactico.