Si puedes hacer cualquier otra cosa, no pierdas el tiempo viendo esta pelicula. Resulta inexplicable que le hayan dado un oscar a la mejor película de este año. Ben Affleck vuelve a confirmar, una vez más que es un absoluto fraude, un soso completamente vacío de interés.
Basada en una historia real, la película consigue despojarla de la emoción que sin duda tuvo. Si consigues verla sin dormirte, tendrás suerte.