Bonita historia donde las relaciones entre los protagonistas son de lo más curiosas. A pesar de haber secuencias un tanto absurdas, el argumento resulta entrañable con toques de humor bastante graciosos.
Cuando empezé a verla creí que iba a ver una mala película, pero me equivocaba, Benjamin hace una buena mezcla de humor y romanticismo con la que disfruté. El final me gustó mucho, es totalmente imprevisible con la incorporación de alguna risa que otra. Richard Benjamin consigue hacer una historia bonita, lejos de los tópicos y dándole un aire original. Aunque no la puedo considerar como buena, sí es entretenida y divierte.