Dejando aparte el atractivo de los protagonistas, la historia no ofrece mayor interés que una romance entre homosexuales. El protagonista principal trabaja para una agencia de chicos de compañía y justo en esta historia está la falsedad de la película: que fácil y que divertido es acostarse con unos y con otros por dinero. Después está la relación entre los dos jóvenes que surge, sin más, de unas miradas e inmediatamente ya están comiendo con el padre del que aparentemente no es homosexual y sin embargo si es policía. ¡Que mal está contado este principio de relación! Precisamente en la narración es donde más falla esta película, parece realizada a partir de un guión al que le faltan páginas. No hay cosa que peor me siente al estar viendo una película que se produzca un hecho sin explicación ni unión con la trama. Aquí hay muchos de estos momentos inexplicables, pero a mi me parece indecente que no lleguemos a tener claro quien sale de una habitación en la que se encuentran los dos protagonistas con la importancia que tiene esta escena.