Las dificultades docentes en un alumnado difícil en zonas marginales es un tema ampliamente tratado en muchas producciones. La conclusión siempre suele ser la misma y es que un buen pedagogo puede conseguir buenos resultados si sabe estimular a jóvenes desincentivados. Esta película no es la excepción. El protagonista es un solterón con apariencia un poco plasta y dura, pero con buen corazón, que se las sabe ingeniar para ganarse la atención de su clase, despertando la envidia de sus colegas. El discurso aleccionador sería aburrido si no fuera por la bondad del guion y el buen hacer del actor principal. Son interesantes las referencias literarias del mundo clásico y de "Los miserables" de Victor Hugo. El film no es uno más de profesores y chavales complicados. Los actores juveniles no profesionales y el desarrollo de la acción con situaciones jocosas y otras más serias, siempre dentro del mundo real, justifican su visionado y disfrute, a pesar de los mismos clichés de siempre.