Algunas veces las películas que recordamos como fantásticas o especiales cuando eramos niños ahora nos parecen auténticos bodrios lentos, infantiles y ridículos. La manera de narrar las películas ha cambiado, los medios, las historias. "La fuga de Logan" no destaca por haber envejecido especialmente bien en ningún aspecto pero sigue siendo una buena película en la linea de la ciencia ficción pesimista de finales de los 60 y principios de los 70, un género que pronto pasaría a mejor vida con la llegada de la ciencia ficción espectáculo como "Star Wars" o la ciencia ficción adulta como "Alien" o "Blade Runner".

"La fuga de Logan" sigue manteniendo ese espíritu pop e infantil que tan pasado de moda nos parece aunque curiosamente nuevos visionados siguen haciendo que la película nos parezca mas entretenida que interesante pero indudablemente no es ningún bodrio. Tan solo una buena película de ciencia ficción que ha envejecido mal.

Lo mejor: El ritmo. La historia. La partitura de Jerry Goldsmith.
Lo peor: Las maquetas de la ciudad. Las actuaciones de algunos protagonistas.

Una película que si bien no puede ser revindicada como una obra maestra si que queda como un simpático ejemplo de lo que fue una época de la ciencia-ficción y sobretodo el último ejemplo de un tipo de cine que ya no se hace.

Cuarto años mas tarde el propio Michael Anderson (director) volvería a incidir en la ciencia ficción clásica (o pasada de moda) en la serie de TV “Crónicas Marcianas” con mas pena que gloria.