Fallido intento (en gran parte) de Hasbro de repetir el éxito de la saga Transformers con una historia diferente. ¿El problema? Que acaba siendo lo mismo pero mucho peor. Quizás es que falte la mano de un productor como Spielberg (productor de Transformers) y carece de emoción y sentido del humor de los originales. Los actores están mal escogidos, los planos son los mismos de siempre, abusando de la cámara lenta, de la cámara en movimiento, de los zooms, todo lo que es marca de la casa de Michael Bay que aquí se usa solo en función de recrear un estilo que no es el suyo. ¿Es entretenida? Muchísimo. ¿Es buena? Para nada. Es un Transformers de segunda división pasado por el tamiz del patriotismo americano y rodada sin la menor gracia. Pero repito lo mismo: ¿es entretenida? Muchísimo. Recomendable solo para los que no pueden esperar el estreno de la nueva entrega de Transformers.