Documental que explora la vida de los seis hermanos Angulo, quienes fueron criados por sus padres encerrados en su pequeño apartamento en Manhattan. La educación corre por cuenta de la madre, mientras el padre es el cerebro tras este enfermizo clan, quien deseó alejar a sus retoños de todos los peligros que vivir en sociedad conlleva.

Como es de esperarse, la vida de estos hermanos está completamente alejada de ser algo normal, al contar con tanto tiempo y tan poco por hacer, encuentran una pasión desmedida, ver películas, y no solo verlas, recrearlas lo más fielmente posible, lo cual genera un ejercicio muy llamativo dentro del texto fílmico.

La obra explora en el pasado y los motivos del padre de realizar semejante crianza, la obra se muestra desde el punto de vista de los hermanos, quienes obviamente le atañen en mayor o menor medida a su papá lo que hizo. El relato sufre un giro en el momento en que uno de los jóvenes sale de casa por primera vez.

Este evento de exploración de un mundo que se veía tan alejado desde la ventana del departamento, trae consigo un quiebre en todas las esferas del grupo familiar, el castillo de naipes se derrumba, se desobedece al “rey”, la rebeldía del mayor de los jóvenes emerge, es el fin del clan.

The Wolfpack es un film que desborda interés, presenta una historia de vida muy interesante, visualmente impacta, estos chicos idénticos, con su larga cabellera, con sus dientes sobresalientes, que visten similar y que recrean películas. Es un buen trabajo, pero se siente que le faltó algo a Moselle, esto en la línea del guion, para crear algo verdaderamente épico, aun así es disfrutable y se sostiene bien en sus cortos 80 minutos de duración.