El documentalista brasileño João Moreira Salles vuelve a dirigir otro proyecto ambicioso, y en esta ocasión con unos materiales de archivo en algunos casos inéditos sobre dos hechos históricos que sucedieron en Europa en 1968, y otro adicional con material propio familiar aprovechando la estancia de su madre en China para ofrecer pinceladas de lo que fue la Revolución Cultural en ese país asiático. El proyecto se presentó en la Berlinale de 2017 ya que estaba integrada en la sección Panorama y unos meses después formó parte de la sección Zabaltegi-Tabakalera del festival de cine de San Sebastián. También ha formado parte de la sección Memoria histórica del Atlántida Film Fest 2018. Además obtuvo dos candidaturas a los premios Fénix 2017, en los apartados de largometraje documental y música original original, siendo derrotado en ambas categorías por " La libertad del diablo ( 2017 ) ".

Durante la primera mitad del largometraje va alternando las imágenes y vídeos de los archivos familiares de la estancia de su madre en China en1966 y el Mayo de 1968 en Francia desde diferentes puntos de vista, y está dividida en capítulos con su título correspondiente, con la voz en off del director comentando lo que estamos viendo. En el tercio final deja de lado lo que sucedió en Francia para que el espectador viaje hasta la Checoslovaquia de esa misma época en la llamada Primavera de Praga. Las magníficas imágenes en blanco y negro, la música de Rodrigo Leão seleccionada para acompañar a las fotografías y el carácter informativo para las nuevas generaciones que podrían exponerse en facultades de historia del siglo XX, son alicientes suficientes para disfrutar de este documental. Los principales puntos negativos son esos momentos de fundido en negro, mientras seguimos escuchando la voz en off, que no he terminado de comprender si tenían algún sentido. Tanto en la Revolución China como el Mayo del 68 en París están muy bien tratados y se queda corto el análisis de lo que sucedió en Praga.

LO MEJOR: El material fotográfico de archivo y la banda sonora.
LO PEOR: La Primavera de Praga no está tratada con tanta profundidad como los otros dos hechos históricos.

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