Película horrible donde las haya que quiere mezclar el género de robos con la comedia romántica, y claro, metan eso en una coctelera y qué da, pues un truño de dimensiones faraónicas. Pierce Brosnan tiene la gracia de Fofito con tres chupitos de tequila encima y Woody Harrelson está, simplemente, fatal y sobreactuado.

El argumento es simple, un ladrón, en teoría retirado ve la posibilidad de robar un diamante dentro de un crucero, todo ante la atenta mirada del agente del FBI que lleva toda la vida detrás de él; ah, sin olvidarnos de meter a Salma con calzador claro, vamos, topicazo tremendo.

Si ustedes son del tipo de personas que "ve la química" entre las parejas de actores, prueben suerte, si no, pues miren, cuando lleguen al dvd en el videoclub, sigan el pasillo y busquen otra cosa.