Mao Mao: Héroes de Puro Corazón es una de las nuevas apuestas de Cartoon Network para su público infantil. Para lo que es, hace un buen trabajo a la hora de presentar a un variopinto grupo de héroes que luchan por la libertad (y la fama) aderezado con situaciones graciosas y alguna lección bonita.

La sinopsis es sencilla: un gato guerrero llamado Mao Mao llega, junto a su colega Ojotejón (Badgerclops en el original) al Valle del Corazón Puro dispuesto a labrarse un nombre como héroe, leyenda y cazador de monstruos. Por desgracia, allí todos los aldeanos son unos monos y achuchables animalillos que los únicos quebraderos de cabeza que le podrán causar son concursos de guerra de pulgares, festivales con tartas y nimiedades del estilo. Solo la amenaza constante del archienemigo de Mao Mao, Serpiengután (Orangusnake en el original) suponen un verdadero reto para el guerrero, que se convierte en el sheriff del Valle bajo las órdenes del rey Melencuqui (Snugglemagne en el original). En su viaje, Mao Mao se convierte casi sin querer en el mentor de Adorabat, una adorable murciélaga coja que sueña en convertirse también en heroína.

Con la premisa establecida, es obvio el desarrollo que va a tener esta serie para niños: aventuras varias donde los tres héroes principales (Mao Mao, Ojotejón y Adorabat) colaboran o tienen sus diferencias que deben aprender a superar en equipo, mientras algunos encargos ridículos del rey ocasionan situaciones cómicas que se equilibran con verdaderos peligros que aparecen aquí por allá en forma de dragones, bestias o piratas. Dado que en este mundo todos los personajes son animales con diseños adorables, es de esperar mucho humor infantil que en cierto modo funciona por una animación decente, ciertos toques ácidos en el guion, y sobretodo personalidades muy definidas encabezadas por un arrogante Mao Mao cuyas expresiones exageradas se llevan la palma.

Sin embargo, he de admitir que en su momento le di un 7 pero que recientemente le he bajado la nota porque, en retrospectiva, Mao Mao es una buena serie para el público infantil a la que no hay mucho interés en volver si eres adulto. Aunque el gato protagonista tiene buena esencia, basta con echar un vistazo al catálogo reciente de Cartoon Network para ver que, en realidad, la serie de Parker Simmons no ofrece nada realmente innovador: no tiene la profundidad psicológica que elaboró Hora de Aventuras, no tiene el alocado guion y tramas absurdas con las que nos divertía Historias Corrientes, no tiene un mundo especialmente original y creativo como los vagones que visitan los pasajeros del Infinity Train, no tiene técnicas creativas en la animación que la hacen única como sí le pasaba a las idas de olla del Asombroso Mundo de Gumball... Y si cambiamos de cadena al Disney Channel actual, solo series como Casa Búho y Patoaventuras ya le dan mil vueltas a Mao Mao.

Esto no quiere decir que no la recomiende, y más aún si tienes niños pequeños a los que les quieras ofrecer algo que no los trate como tontos. En su momento la vi en versión original, pero tiene un doblaje castellano con el que será muy accesible si te la encuentras por televisión. Así que niños, ¡uníos a Mao Mao en su viaje para lograr convertirse en el mejor héroe de toda la historia! Padres y demás, echadle un vistazo sin miedo que no os hará daño, aunque no creo que valga la pena que la guardéis en vuestro Puro Corazón.