La mayoría de cortometrajes decepcionan. Todos se rigen por la misma regla de no sobrepasar el minuto de duración, pero son muy pocos los que lo aprovechan para intentar contar una historia. Hay algunos que pueden ser realmente sorprendentes, como Good morning, de Satoshi Kon; o la simpática historia de A Gathering of Cats, de Makoto Shinkai; aunque por desgracia estos son excepciones.
Ani*Kuri es, desde luego, un buen ejercicio de animación, pero por desgracia, no tanto así de guión. Juega en su favor que entre todos los cortos no llegan a sumar 20', por lo que el sopor que muchos de estos generan se acaba pronto. Pese a todo, vale la pena darles una oportunidad para descubrir las sorpresas que esconden.