En primer lugar, a esta película le falta poco para ser porno. Quizás sea una afirmación un poco exagerada, pero creo que no va muy desencaminada. Hay un alto (altísimo) contenido erótico y/o sexual a lo largo de todo el metraje. Hay varias escenas de sexo, bastante explícitas, violaciones por parte de seres demoníacos, felaciones más que evidentes... Un popurrí de escenas sexuales (lo menos seis o siete) que aportan más bien poco a la trama, por no decir nada, pero que hará las delicias de los más salidos. Al menos un tercio de película se sucede entre gemidos de placer de fondo.

Cambiando de tercio. La trama es cierto que va bastante rápida y directa (su duración de menos de hora y media le beneficia en ese aspecto). No hay demasiados baches, los justos digamos. Los personajes son bastante planos: un bueno muy bueno (Taki Renzaburo, uno de los agentes negros), la chica que termina enamorándose del bueno (Makie: la otra agente negra, pero esta vez procedente del otro mundo) y el doctor Giuseppi Mayart, un viejo verde, enano y malformado que es un salido y un perturbado sexual. Sin duda es el que más juego da, pero el 90% de sus comentarios son referentes al sexo y a la picaresca. Reconozco que tiene algunos buenos muy puntos: es el único que da algo de vidilla al asunto.

La estética del filme tiene un cierto aire a cine negro futurista, y es probablemente uno de los grandes aciertos de esta película. La recreación de atmósferas recargadas y de tensión son muy apropiadas, así como también lo son la forma y las habilidades de los seres del otro mundo. El nivel de explicitud de la violencia es bastante alto, algo que se agradece. Hay altas cantidades de sangre y de imágenes sumamente desagradables y bizarras (desde la del doctor siendo absorbido por el cuerpo desnudo de una prostituta que resulta ser una criatura demoníaca, hasta un gusano gigante que se mete por la boca de la chica como si se tratará de una... bueno, ya podéis imaginároslo).

Así pues, curioso filme japonés de animación que tiene en sus manos una historia interesante, pero que es irregularísima. La gran cantidad de escenas de sexo limitan sobre manera el desarrollo normal de la trama, que se ve trabada continuamente. El giro de guión final, bastante predecible, no aporta nada ni a favor ni en contra, porque es tan evidente que, quien más, quien menos, ya lo daba por hecho. En cualquier caso, película que, con sus virtudes y sus defectos, pues se deja ver, pero poco más.