Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Lafuente Estefanía:
6
Drama Tratando de salir de la miseria, un pescador decide dedicarse al contrabando, llegando incluso a utilizar a sus mejores amigos. Su falta de ética se hará aún mayor cuando se convierta en el amante de la novia de su hermano. (FILMAFFINITY)
28 de octubre de 2023
Sé el primero en valorar esta crítica
Pronunciado como una hache aspirada, "¡Jala!", es el grito con el que los viejos y las mujeres se animan para sacar a la playa a rastras las pesadas redes con la pesca que traen las barcas de bajura.
Son los desesperados, los que tienen miedo de ir al mar o ya no pueden hacerlo. De esta forma se ganan unas migajas con las que ir sobreviviendo.
Magníficas escenas halando en largas filas de haladores que por un momento recuerdan a "Stromboli" (1950). A medio camino entre el neorrealismo y el documental que nos sumerge en las artes de pesca y en el folclore onubense.
Sí, estamos en Huelva y tenemos tiempo para ir a la romería de la Virgen de la Cinta con sus seguidillas, el baile masculino de las navajas o la gallera.
Está a punto de zarpar el San Miguel para pescar en la zona del Estrecho y al frente van dos hermanos, Carmelo (San Martín) y Jorge (Danet), pilotos de cabotaje y de pesca respectivamente. Hermanos pero distintos, "Aunque los dos sean de mar, no es lo mismo pulpo que calamar", al decir del Sabio (Bolas). Y distantes, pues ambos pretenden a Alicia (Roberts), una escultura haladora con aspiraciones que solo puede proporcionar el contrabando, la "pesca de altura".
Pese a algunas imprecisiones (no es de recibo abandonar sin más un marino caído al océano) un buen guion. Lo mismo que la realización que alterna la parte romántica con la dramática. Cierto que sobra algo de melodrama y falta tensión en los momentos clave. El ritmo es bastante irregular.
A destacar escenas como la del duelo de los padres del pescador desaparecido bajo las aguas cuando regresan sin él sus compañeros, o la crítica social que destila la cinta con los abusos de armadores sin escrúpulos o entrar en las míseras barracas donde malviven los haladores.
Para que luego hablemos del cine español y de la censura. Estamos en 1956.
Una película muy interesante con buenas interpretaciones, pero lamentablemente poco conocida. No se la pierdan.
Lafuente Estefanía
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow