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Voto de Nolte:
10
6,8
32.419
Drama
Ambientada en 1953, narra el enfrentamiento real que, en defensa del periodismo independiente, mantuvieron el famoso periodista y presentador de la CBS Edward R. Murrow (David Strathairn) y su productor Fred Friendly (George Clooney) contra el poderoso senador anticomunista Joseph McCarthy, hecho que determinó el final de la "caza de brujas". (FILMAFFINITY)
13 de marzo de 2006
25 de 33 usuarios han encontrado esta crítica útil
Inteligente crítica sobre el mundo de la televisión como medio de información y entretenimiento. Genial.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El duro enfrentamiento entre el senador Joseph McCarthy y el presentador de televisión Edward R. Murrow y el Comité de Actividades Antiamericanas es el hilo conductor de esta interesante película, segunda como director de George Clooney en la que realiza una crítica muy inteligente sobre el mundo de la televisión como medio de comunicación y entretenimiento.
Edward R. Murrow (interpretado con maestría por David Strathairn) fue acusado de ser comunista por el senador McCarthy en plena caza de brujas. Todo el que lo fuera o conociera a alguien de esas tendencias políticas corría el riesgo de ser detenido, e incluso podía perder su puesto de trabajo. Murrow se defendió valientemente en una serie de discursos donde hacía gala de un pensamiento crítico ejemplar y una gran habilidad como orador. Han quedado en la memoria del espectador los momentos en los que Strathairn, con la cabeza ligeramente vuelta hacia la cámara y una mirada a la vez seria e incisiva pronuncia unos discursos en los que no sobra ni una palabra. El control facial, las pausas que efectúa mientras habla con voz tranquila pero firme y la forma en que de vez en cuando mira hacia abajo echar un vistazo al guión del programa hasta que pronuncia la célebre despedida "buenas noches, y buena suerte", le dan al personaje el color y la fuerza emotiva que nos hace agradecer que este rodada en un elegante y sobrio blanco y negro, muy al estilo de las películas de esa época.
La cinta transcurre a ritmo de blues, cuyas notas se enredan en el aire con las indolentes volutas de humo de esos cigarros que nunca se consumen. Por otro lado, la manera en que están retratados los escenarios, como el plató y la sala de realización, con contratados claroscuros y una extrema precisión de encuadre donde el movimiento de los personajes está estudiado escrupulosamente, hace parecer al espacio algo oscuro e inexpugnable a la vez que le confiere respeto.
El reparto es de muchos quilates, con actores de la talla de Robert Downey Jr. ("Kiss Kiss Bang Bang, Vidas Cruzadas"), Patricia Clarkson ("Peter Pan"), Ray Wise ("Twin Peaks, Jeepers Creepers, Dead End"), Jeff Daniels ("Speed"), etc.
No está claro si es deliberado o no por parte de Clooney, pero llama la atención el siguiente hecho: en un momento de la cinta hay un plano de un televisor que están viendo algunos personajes, y bajo la pantalla se lee "Westing House", que es justamente la empresa a la que cuarenta años después estuvo a punto de ser vendida la CBS debido al escándalo con la tabacalera Brown & Williamson, denunciada por el doctor Geoffrey Wigand por introducir en los cigarros un ingrediente nocivo para la salud, tal y como describe la película "El Dilema", de Michael Mann.
Por otro lado, dada la atmósfera marcadamente anticomunista, es irónico y admirable que el mensaje de despedida del programa de Murrow fuera tan generoso como para desear al espectador buenas noches, y buena suerte.
Una joya.
Edward R. Murrow (interpretado con maestría por David Strathairn) fue acusado de ser comunista por el senador McCarthy en plena caza de brujas. Todo el que lo fuera o conociera a alguien de esas tendencias políticas corría el riesgo de ser detenido, e incluso podía perder su puesto de trabajo. Murrow se defendió valientemente en una serie de discursos donde hacía gala de un pensamiento crítico ejemplar y una gran habilidad como orador. Han quedado en la memoria del espectador los momentos en los que Strathairn, con la cabeza ligeramente vuelta hacia la cámara y una mirada a la vez seria e incisiva pronuncia unos discursos en los que no sobra ni una palabra. El control facial, las pausas que efectúa mientras habla con voz tranquila pero firme y la forma en que de vez en cuando mira hacia abajo echar un vistazo al guión del programa hasta que pronuncia la célebre despedida "buenas noches, y buena suerte", le dan al personaje el color y la fuerza emotiva que nos hace agradecer que este rodada en un elegante y sobrio blanco y negro, muy al estilo de las películas de esa época.
La cinta transcurre a ritmo de blues, cuyas notas se enredan en el aire con las indolentes volutas de humo de esos cigarros que nunca se consumen. Por otro lado, la manera en que están retratados los escenarios, como el plató y la sala de realización, con contratados claroscuros y una extrema precisión de encuadre donde el movimiento de los personajes está estudiado escrupulosamente, hace parecer al espacio algo oscuro e inexpugnable a la vez que le confiere respeto.
El reparto es de muchos quilates, con actores de la talla de Robert Downey Jr. ("Kiss Kiss Bang Bang, Vidas Cruzadas"), Patricia Clarkson ("Peter Pan"), Ray Wise ("Twin Peaks, Jeepers Creepers, Dead End"), Jeff Daniels ("Speed"), etc.
No está claro si es deliberado o no por parte de Clooney, pero llama la atención el siguiente hecho: en un momento de la cinta hay un plano de un televisor que están viendo algunos personajes, y bajo la pantalla se lee "Westing House", que es justamente la empresa a la que cuarenta años después estuvo a punto de ser vendida la CBS debido al escándalo con la tabacalera Brown & Williamson, denunciada por el doctor Geoffrey Wigand por introducir en los cigarros un ingrediente nocivo para la salud, tal y como describe la película "El Dilema", de Michael Mann.
Por otro lado, dada la atmósfera marcadamente anticomunista, es irónico y admirable que el mensaje de despedida del programa de Murrow fuera tan generoso como para desear al espectador buenas noches, y buena suerte.
Una joya.