Os lo aclaro: me pierdo en el paso intermedio que va de las imágenes y los diálogos del film a la traducción que de él hace la crítica.
Allí donde todo el mundo ve oro, yo no veo ni mierda; tan solo una pared gris que no me dice nada.
Dos cositas fueron las que más me decepcionaron: Sofia Coppola y toda su película, por una parte, y los críticos de cine por la otra.
No sé porqué, pero todo esto me recuerda a las galerías de arte moderno.
spoiler:
La escena del karaoke o del anuncio de Murray (cada día peor actor): dos momentos a resaltar por ser aún más anodinos e insulsos que el resto de la película.
Hasta Scarlett Johansson... ¡sale gorda (en algún momento llegué a pensar que querían hacer ver que estaba embarazada)!
Un horror. Paso de aplaudir gilipolleces como ésta o todas las de Wes Anderson, es que no me da la gana.
Y la secuencia del final... a mí me importaba un mojón si se besaban o no se besaban, jamás en un sala de cine me ha producido algo tanta indiferencia: sólo quería que terminase de una p--- vez.
PD: Para alargar secuencias y planos innecesariamente con idea de "crear poesía" llamen a Terrence Malick. Le sale bastante mejor.