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España España · Shangri-la. Andalucía
Voto de Maggie Smee:
8
Musical. Comedia. Romance A principios del siglo XX, las películas de cine por fin empiezan a incorporar sonido. El teatro real de Portsmouth, en Inglaterra, representa una obra musical llamada The Boy Friend. El público es tan escaso que, casi siempre, hay más actores que espectadores en la sala. La actriz principal, Rita Monroe, se lesiona y deja a sus compañeros colgados a unas horas de comenzar la representación. Justo ese día, un famoso director de ... [+]
18 de noviembre de 2022
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
En 1969 Ken Russell empieza a triunfar internacionalmente con “Mujeres enamoradas”, según la censura de los diferentes países que empiezan a permitir su estreno. No fue hasta dos años después, en 1971, y en la cresta de la ola de su éxito, cuando da el “do” de pecho creativo con dos películas absolutamente diferentes. Tras rodar la muy polémica “Los demonios”, (película que defiendo) la cual sufrió cortes en los países que permitían que se proyectara y teniendo que pasar bastantes años hasta conseguir exhibirse íntegra, también rodó el musical “El novio”, que por erróneas razones meramente comerciales, también fue recortada. En España, a pesar de su éxito en otros países, su distribución se limitó a copias en versión original subtitulada, y cuya duración era de 110 minutos. La película se va estrenando con diferentes duraciones, pero la copia que hemos conseguido visionar es de 137 minutos, la más completa si exceptuamos el montaje del director, con tres minutos más y que fue comercializada en Reino Unido.

Una pena que “El novio” siga siendo en nuestro país una gran desconocida, ya que con el auge de los musicales en teatro (muchos de esos montajes pensados para profanos y turistas) y habernos quitado de encima ciertos prejuicios, sería una gran oportunidad para sacarla a la venta y disfrutarla en óptimas condiciones en DVD o Blue Ray.

Antes de entrar en materia, señalar que ese año también, curiosamente, se rueda otro musical británico también con producción de la EMI- MGM, “Los cuentos de Beatrix Potter”, un musical infantil “diferente”, sin diálogos y con bailarines disfrazados de animales, personajes de Potter, su autora. La mejor parada a nivel de taquilla y de “fama” fue el caso presente, aunque a la hora de acordarse de ella para posibles premios del año no fueron nada generosos.

Aunque “El novio” me ha parecido una notable película (no sé si la única apta para todos los públicos que Russell haría en su vida), no es un musical típico y sería para muchos una prueba de fuego para saber si gustan de musicales famosos o si aceptan también propuestas que se alejen de un cine abiertamente comercial y que bucea, con desenfado, en el precioso mundo del teatro, de los comediantes y de las tramoyas. Por favor, no utilicen el término bambalinas, que hasta los medios de comunicación más formados no saben aplicarlo correctamente cuando se pretenden referir a “entre bastidores” por ejemplo. Paletos. Pero bueno, es un fiel reflejo de la cultura e importancia del mundo de la farándula en nuestra sociedad y de la formación de los “expertos”.

“El novio” fue rodada en el The New Theatre Royal en Portsmouth, y se basa en la obra de Sandy Wilson, cuyos derechos fueron comprados por Arthur Freed en 1957 para la Metro. La iba a protagonizar Debbie Reynolds, pero nunca se hizo, y desde entonces, muchos fueron los intentos por llevarla al cine, pero ni con ella, Liza Minnelli o Julie Andrews, que fue quien la hizo en teatro en Broadway y a la que se le ofreció el papel bombón (casi un cameo) de Rita Monroe en esta su versión cinematográfica, quien lo rechazó y fue a parar a Glenda Jackson, gran amiga de amiga de Russell, quien, a pesar de tener un calendario apretado, su papel lo resolvió en un día de rodaje, todo un récord y encima lo clavó.

Fue rodada en 70 mm, por lo que tuvieron que traer de Estados Unidos la cámara apropiada, y en precioso metrocolor por el gran David Watkin, logrando un óptimo resultado.

Sirva de modesto homenaje esta referencia: El espléndido vestuario corrió a cargo del oscarizado por “All That Jazz” Tony Walton, fallecido el dos de marzo del presente año, y que era un experto en vestuario y decorados, responsable de muchos títulos de cine y teatro y que ya forman parte de su historia, así como los entrañables y coloristas decorados de Ian Whittaker, fallecido el dieciséis de octubre de este año y también responsable de trabajos como “Alien” o “Regreso a Howard´s End” por la que por esta última fue premiado con el “Oscar”.

Maravillosa la orquestación que se hace de sus temas y su ambientación, todo muy teatral, hasta su maquillaje, que recrea el mundo de una compañía muy modesta en un teatro con pocos espectadores. Como llegan a decir en el propio film, y esto no es “spoiler”, hay más actores en el escenario que público en el patio de butacas.

El guion de Ken Russell, que adapta esta famosa obra de Sandy Wilson, sigue los parámetros previsibles de lo que es esta clase de obras romántico- musicales sin añadir muchas sorpresas en sus acontecimientos. Mejor su inspirada dirección en la que refleja su atracción por este tipo de género.

Prosigo en la zona spoiler por falta de espacio pero sin destripar absolutamente nada.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Maggie Smee
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