La película basa su historia en la Revolución de Mayo (Argentina) desde la mirada de un Juan José Castelli que transcurre sus últimos días de su vida.

A partir de su relato y con infinitos flash back el guión intenta develar la intrincada y compleja historia de un revolución compleja y hasta contradictoria como lo ha sido en realidad. Así pasan por la pantalla decenas de próceres, algunos famosos y muchos olvidados por la historia oficial. Santiago de Liniers, Bernardo de Monteagudo, Manuel Belgrano, Mariano Moreno, Paso, Saavedra, etc...

El film intenta ser didáctico y revelador pero por el montaje que abusa de los flash black y la gran cantidad de personaje que desfilan, la película se convierte en algo muy complicado de entender para quien no conoce la historia y algo banal para quién si la conoce.

La fotografía abunda en planos medios y cortos, como si se tratara de un teleatro de la tarde desperdiciando de esa forma la posibilidad de escenarios amplios y bellos los cuales hubiera podido mostrar.

No está mal como intento pero... para película histórica le falta rigor, para película didáctica le falta simpleza y para película de pantalla grande le falta fotografía.