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España España · Madrid
Voto de Eduargil:
8
Animación. Fantástico. Aventuras Kubo vive tranquilamente en un pequeño y normal pueblo hasta que un espíritu del pasado vuelve su vida patas arriba, al reavivar una venganza. Esto causa en Kubo multitud de malos tragos al verse perseguido por dioses y monstruos. Si de verdad Kubo quiere sobrevivir, antes debe localizar una armadura mágica que una vez fue vestida por su padre, un legendario guerrero samurái. (FILMAFFINITY)
27 de febrero de 2017
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Estamos ante una película para toda la familia, y de la mejor de las cuatro realizadas por los estudios Laika tras Los Mundos de Coraline (2009), El Alucinante Mundo de Norman (2012), y los Boxtrolls (2014) con una historia visualmente deslumbrante donde un niño llamado Kubo de un solo ojo atiende por las noches a su madre enferma que pierde lentamente su memoria, y visita los mercados de una ciudad costera por el día para ganar dinero relatando cuentos fantásticos. Un día su tranquila vida cambia cuando invoca por accidente a un espíritu del pasado que lo embarca en una aventura cuyo objetivo será salvar a su familia y para ello debe encontrar una armadura mágica que perteneció a su padre, un gran guerrero samurái. Kubo está acompañado en su misión por un mono (Voz de Charlize Theron) y un escarabajo guerrero (Matthew McConaughey, la primera vez que participa en una película de animación). Durante su búsqueda son perseguidos por unos dioses y monstruos.

Realizada con de la técnica stop motion en combinación con la vanguardista CGI da como resultado una rica variedad de efectos visuales que podemos disfrutar en innumerables escenas como por ejemplo en las que aparecen los dioses y monstruos ingeniosamente diseñados que nos traen a la mente las películas de la pionera empresa en stop motion de Ray Harryhausen.

Magnífica producción estadounidense que establece una visión fantástica del Japón medieval donde se recrea una rica historia de aventuras como resultado de la combinación de la cultura occidental con las tradiciones literarias y teatrales japonesas, quizás con el fin de mirar y entrelazar ambas culturas de nuevo como cuando Akira Kurosawa adaptaba las obras de Shakespeare al Japón del medievo y moderno y a su vez, ciertos realizadores occidentales se inspiraban en películas japonesas para el western. En Yojimbo (1961) tenemos un claro ejemplo lo que significó para Sergio Leone y el Spaghetti Western, e inclusive para el western clásico americano, donde el personaje que interpreta Mifune está lleno de similitudes con el interpretado por John Wayne en Centauros del Desierto (1956). Siguiendo con este paralelismo, Kubo y las dos cuerdas Mágicas utiliza un entorno japonés para mostrar al público occidental una manera diferente de concebir la muerte, el luto y la memoria, como también, la idea del ojo robado podría considerarse como un guiño a la mitología griega.

Basado en una concepción metafísica de la otra vida inspirado en las teorías de Shinto y en las tradiciones budistas donde las personas tras la muerte se convierten en un espíritu-deidad y protegen siempre a sus descendientes, la película ofrece una poderosa metáfora sobre la manera que llevamos en la memoria a nuestros difuntos como parte de nosotros mismos, que complementa y ofrece una alternativa atractiva a las creencias judeocristiana sobre el tema.

Como dato anecdótico, es la segunda vez que los estudios Laika contratan actores de la serie juego de tronos para utilizar su voz en algún papel principal, primero fue Isaac Hempstead (Bran Stark, el hijo paralítico de Eddard Stark) en el film Los Boxtrolls para dar vida a Eggs, y ahora Art Parkinson ( El hijo menor de Eddard Stark) en el papel de Kubo.

El resultado final es una historia maravillosa, emocionante y sofisticada narración, que divertirá tanto a pequeños como a mayores.

CINEMAGAVIA
Eduargil
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