Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Cinemagavia:
7
Drama Años después de que termine su amor de verano, un aspirante a productor de televisión y una talentosa músico cruzan sus caminos, dándose cuenta de que los sentimientos que profesan el uno por el otro nunca han cambiado. Con sus carreras llevando a cada uno de ellos por senderos distintos, ambos deben decidir qué les importa más: su carrera profesional o su corazón. (FILMAFFINITY)
27 de diciembre de 2020
8 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
*Un verano en Harlem

Sylvie’s love, dentro de las limitaciones presupuestarias que posee, trata de parecer estilosa y elegante desde el mismo principio. Todo ello aderezado con un regusto de bohemia urbana. Y ciertamente esa atmósfera tiene encanto, aunque Eugene Ashe quizá lo haya romantizado un poco. Estamos en Harlem en los años 50. Clubs de jazz donde excelentes y prometedores cuartetos tratan de ganarse la vida con la música. Tiendas de discos donde se habla sobre Thelonius Monk, John Contrane o Sonny Rollins. Y amores imposibles difíciles de controlar.

Robert (Nnamdi Asomugha) es un saxofonista talentoso que suele tocar con su cuarteto en el Blue Morocco, de Harlem. No le da lo suficiente para vivir, así que entra a trabajar en una tienda de discos donde conoce a Sylvie (Tessa Thompson), la hija del dueño. Entre conversaciones musicales y pequeños equívocos, va surgiendo una pequeña chispa entre ambos que irá prendiendo cada vez con más fuerza.

Es encantador que Sylvie se dé cuenta de que realmente está enamorada de Robert viéndole tocar el saxo. Como si la música fuera una celestina. Finalmente una noche pasa lo que tiene que pasar, y Robert acaba besando a Sylvie. Sin embargo, hay dos obstáculos insalvables. Ella está prometida con un hombre de un estatus social elevado, y a él le ha surgido una oportunidad profesional importante en París. Demasiados problemas para un amor incipiente. Además, hay un detalle que Sylvie decide ocultar a Robert. Está embarazada de él.

*El amor que viene y va

Sylvie’s love tiene su fundamento y mayor influencia en los melodramas clásicos americanos. Está impregnada del espíritu de Douglas Sirk y Vicente Minelli. Tiene la misma aparente sencillez, su toque naif, y también una factura similar. La variante puede residir en que los protagonistas sean todos afroamericanos, cosa harto difícil hace unas décadas. En cualquier caso no se trata de una película particularmente combativa racialmente (tampoco hay obligación), salvo un par de menciones. Sin embargo, por la parte de Sylvie si hay una clara visión feminista, de mujer fuerte que persigue sus sueños.

Y es que ése es uno de los temas de Sylvie’s love. La disyuntiva entre perseguir sin límites tus sueños, o sacrificarlos por amor. Este tema recuerda un poco a La La Land, pero se plasma de una forma diferente. Robert y Sylvie se encontrarán a lo largo de los años, en un amor un discontinuo, que viene y va con el tiempo. Ella no es feliz en su matrimonio, y él sigue buscando su camino como músico. Su vida, en los aspectos amorosos y profesionales estará llena de dilemas.

Esto hace que Sylvie’s love pase por varias fases y tenga un ritmo sinuoso, donde se van intercalando felicidad y tristeza. No todas las fases, digamos, están a la misma altura, y se podrían haber pulido algunos elementos. No obstante, el cómputo general es favorable y Sylvie’s love mantiene nuestra atención solventemente durante los varios años que dura el arco narrativo.

*Aroma a clasicismo

Es indiscutible el apego que Sylvie’s love siente por el melodrama de corte clásico. De un lado tiene los obstáculos habituales: diferencias de estatus social, impedimentos familiares, un destino adverso… El amor que se profesan Robert y Sylvie tiene una luz ingenua de drama propiamente hollywoodiense. La factura también emula bien el ambiente de los años 50 y 60. De una forma sencilla, sin florituras ni adornos de más. Está muy bien lograda la atmósfera retro y elegante del jazz en su auge discográfico, a lo que acompaña una banda sonora apropiada y muy grata de oír. El mundo de la televisión (Sylvie sueña con ser productora de tv) también esta razonablemente bien recreado.

Como el presupuesto no es muy rumboso, no pidamos una cantidad despampanante de medios. Se palpa el amor al cine clásico, pero desde una perspectiva cercana al cine independiente. Un acierto es que Eugene Ashe no recurra al sentimentalismo gratuito, y nos llegue al corazón con sutileza y sin dramones. Incluso hay alguna veta que se podría haber exprimido más emocionalmente.

El principal motor del argumento, ya decíamos, es el dilema entre alcanzar el éxito o alcanzar el amor. Quizá sea un idea un tanto reiterativa, de hecho se va presentando en diversas formas a lo largo de todo el metraje, y posiblemente la respuesta a ese dilema acaba marcando el espíritu de Sylvie’s love.

*Robert y Sylvie

En las actuaciones de Sylvie’s love lo más destacado es Tessa Thompson; consigue un personaje luminoso y tierno con el que es fácil empatizar. Eso no significa que Sylvie sea todo candor, también tiene arrestos para conseguir sus metas vitales. Y sus obstáculos no son fáciles. Empezando por un marido que no la comprende y acabando por un destino que parece alejarla de su verdadero amor.

Nnamdi Asomugha da una réplica competente con su personaje de Robert, y no está exento de sobriedad y elegancia. No llega al nivel de su compañera de reparto, pero no desentona. Un personaje secundario con chispa es el de Mona, una amiga atrevida y pizpireta de Sylvie. La actriz Aja Naomi King lo interpreta con gracia, aunque su presencia se racione mucho. Aparece brevemente Eva Longoria. Apenas son dos apariciones, pero una de ellas acaba siendo significativa en el argumento.

*Conclusiones

Sylvie’s love es un logrado homenaje al melodrama clásico, con la ternura y la elegancia suficiente como para tener la película en cuenta. Aprovecha todas las capacidades sentimentales que el género permite, pero rehúye la blandenguería y la lágrima forzada. Todo fluye de manera natural y, aunque hay algunos vaivenes que sobran, la actuación de Tessa Thompson es realmente buena y suple algunas carencias con su encanto. La película la disfrutarán sobre todo los que busquen guiños al cine de antaño, y gusten de un buen romance.

Escrito por Mariano González
Cinemagavia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow