Media votos
5,7
Votos
971
Críticas
14
Listas
0
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de Bep Spiegel:
8
7,0
56.635
Bélico. Drama
Año 1940, en plena 2ª Guerra Mundial. En las playas de Dunkerque, cientos de miles de soldados de las tropas británicas y francesas se encuentran rodeados por el avance del ejército alemán, que ha invadido Francia. Atrapados en la playa, con el mar cortándoles el paso, las tropas se enfrentan a una situación angustiosa que empeora a medida que el enemigo se acerca. (FILMAFFINITY)
20 de julio de 2017
124 de 200 usuarios han encontrado esta crítica útil
Al no ser un gran entendido en esta pequeña gran maravilla llamada Cine, no fue sino cuando ya había sido estrenada “Origen” cuando descubrí los ‘piques’ entre foreros críticos sobre las películas de Nolan: los que 'saben-de-cine’ vs. los ‘nolanistas’; al parecer si dices que te encantan las películas de Nolan, eres nolanista, y sino, es que sabes de cine y no te dejas engatusar por un cine fácil con más efectos y trucos visuales que guion. En ese momento me dispuse a revisar las películas de este director y, ¡vaya!, resulta que todas sus películas -que haya visto- las encuentro muy buenas (Batman begins), buenísimas (ambas de El caballero Oscuro y Origen), o incluso están en mis favoritas (Memento e Interstellar), por lo que en ese instante pensé: “¿seré también yo un Nolanista?”. A mí me gusta el cine, y me da igual quién haya firmado en la parte de Director, Actor, Guionista, etc., me gusta disfrutar las películas y decir sin miedo lo mucho o poco que me ha gustado, o, como en mi caso con Interstellar, si es mi película favorita. Esta parrafada pude haberla escrito cuando salió Interstellar viendo las críticas de algunos, pero me pareció un acto infantil resultado de una pataleta por lo mucho que me había gustado y ver cómo otros la descuartizaban, vamos, una tontería, cada crítica u opinión, igual que esta, debe ser respetada y no por opinar distinto a otras personas se va a tener más o menos razón.
Con todo esto simplemente quería decir que no soy un fanático de ningún director, aunque las películas de Christopher Nolan que he visto me han encantado, como podéis ver, no he visto otras que según dicen también son muy buenas, como “El truco final” o “Following” [y hasta que se de el momento no pienso verlas únicamente por quién las ha filmado], y puedo decir que Nolan es un gran director, porque no me hace falta entrar en detalles, simplemente decir “¿habéis visto las películas que hace?”, puede que sus filmes tengan sus característicos defectos (el más notable es darlo todo masticado, para que nadie se quede atrás, pero oye, si querer que todo el mundo se entere [ojo, que facilonas tampoco son, y mucho menos esta última] de su película sin quedarse cara de imbécil es un defecto, apaga y vámonos), pero comparado con la gran mayoría de directores estos defectos se quedan en nada. Y es que, Nolan, si con “Memento” ya me ganaste y con “Interstellar” me enamoraste, con “Dunkerque” me has rematado, ya puedo declararme oficial y descaradamente ‘Nolanista’.
Con todo esto simplemente quería decir que no soy un fanático de ningún director, aunque las películas de Christopher Nolan que he visto me han encantado, como podéis ver, no he visto otras que según dicen también son muy buenas, como “El truco final” o “Following” [y hasta que se de el momento no pienso verlas únicamente por quién las ha filmado], y puedo decir que Nolan es un gran director, porque no me hace falta entrar en detalles, simplemente decir “¿habéis visto las películas que hace?”, puede que sus filmes tengan sus característicos defectos (el más notable es darlo todo masticado, para que nadie se quede atrás, pero oye, si querer que todo el mundo se entere [ojo, que facilonas tampoco son, y mucho menos esta última] de su película sin quedarse cara de imbécil es un defecto, apaga y vámonos), pero comparado con la gran mayoría de directores estos defectos se quedan en nada. Y es que, Nolan, si con “Memento” ya me ganaste y con “Interstellar” me enamoraste, con “Dunkerque” me has rematado, ya puedo declararme oficial y descaradamente ‘Nolanista’.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Dunkerque es brillante, intensa, espectacular, impresionante en todos sus aspectos, pero sobre todo asfixiante, ya que no te deja respirar desde su magnífico inicio hasta su inevitable -por desgracia- final. Y es que pocos (tampoco yo) confiaban en la capacidad de Nolan para hacer un buen film basado en hechos reales, ya que, viendo cómo se desenvuelve nuestro maestro director en la ciencia ficción como pez en el agua era difícil imaginar que esta nueva apuesta fuese a superar a sus anteriores proyectos. Pero lo hace.
No sabemos si a Nolan se le da bien apostar o simplemente tiene un don, porque apostar por un actor principal totalmente novato se podría considerar sin duda muy arriesgado, pero parece ser que este hombre no deja nada al azar, el actor Whitehead, sin experiencia alguna en largometrajes (de forma profesional sólo ha participado en tres capítulos de la serie HIM) parece un veterano en la piel de un joven, y no sólo él, casi todos los personajes involucrados, por poco que aparezcan en la película, están correctos o sobresalientes, y, al igual que en la guerra, si esto se consigue es gracias al que los dirige.
Aunque sea una sola línea, debo hacer especial mención a su hermano guionista Jonathan, ya que sin él no sería el Nolan que conocemos.
Y más de una sola línea sí que merece mención la música de Zimmer, este gran compositor nos tiene acostumbrados a bandas sonoras casi perfectas, que encajan de maravilla con las escenas con las que pretende atarnos a la silla y que no deseemos salir de la sala, pero esta vez ha ido más allá. Es difícil asegurar que sea su mejor composición, pero sin duda está al nivel de la cinta, o lo que es lo mismo, a un nivel superlativo.
Para terminar, ojalá Christopher Nolan no gane el Óscar a mejor director por esta película, no porque no lo merezca, sino porque quizá ello haga que se esfuerce aún más en su próximo proyecto y este supere Dunkerque”, si es que se puede.
No me gusta la expresión “el amor de mi vida”, pero hay que admitir que a veces conoces parejas que asegurarías podrían durar toda la vida, lo mismo me pasa con la expresión “obra maestra”, y, aunque no me gusta precipitarme, debo decirlo: es una obra maestra, o al menos creo que lo será, sólo el tiempo lo dirá.
No sabemos si a Nolan se le da bien apostar o simplemente tiene un don, porque apostar por un actor principal totalmente novato se podría considerar sin duda muy arriesgado, pero parece ser que este hombre no deja nada al azar, el actor Whitehead, sin experiencia alguna en largometrajes (de forma profesional sólo ha participado en tres capítulos de la serie HIM) parece un veterano en la piel de un joven, y no sólo él, casi todos los personajes involucrados, por poco que aparezcan en la película, están correctos o sobresalientes, y, al igual que en la guerra, si esto se consigue es gracias al que los dirige.
Aunque sea una sola línea, debo hacer especial mención a su hermano guionista Jonathan, ya que sin él no sería el Nolan que conocemos.
Y más de una sola línea sí que merece mención la música de Zimmer, este gran compositor nos tiene acostumbrados a bandas sonoras casi perfectas, que encajan de maravilla con las escenas con las que pretende atarnos a la silla y que no deseemos salir de la sala, pero esta vez ha ido más allá. Es difícil asegurar que sea su mejor composición, pero sin duda está al nivel de la cinta, o lo que es lo mismo, a un nivel superlativo.
Para terminar, ojalá Christopher Nolan no gane el Óscar a mejor director por esta película, no porque no lo merezca, sino porque quizá ello haga que se esfuerce aún más en su próximo proyecto y este supere Dunkerque”, si es que se puede.
No me gusta la expresión “el amor de mi vida”, pero hay que admitir que a veces conoces parejas que asegurarías podrían durar toda la vida, lo mismo me pasa con la expresión “obra maestra”, y, aunque no me gusta precipitarme, debo decirlo: es una obra maestra, o al menos creo que lo será, sólo el tiempo lo dirá.