Haz click aquí para copiar la URL
España España · Valladolid
Voto de vircenguetorix:
6
Drama Conocido en su barrio por su condición de solitario, Forrester es un hombre cuyo misterio y excentricidad son casi míticos. Cuando Jamal, un destacado estudiante y atleta negro logra colarse en su apartamento con una cartera repleta de trabajos literarios, de manera inesperada e insólita, se establece entre ellos una relación altamente provechosa. (FILMAFFINITY)
30 de noviembre de 2009
10 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
“Puedo prometer y prometo” decía en su celebérrima aseveración el entonces presidente de gobierno Adolfo Suárez. Los políticos, ya se sabe, luego no lo cumplen. Algunos cineastas les pasa exactamente lo mismo. En mi top ten de directores que dan siempre menos de lo que prometen está Gus Van Sant.

Su cine a priori siempre parece atractivo, temas interesantes y aspectos que llaman la atención. Luego la ves y dices: ¿Ya está? ¿Esto era lo que ha dado de sí? “Descubriendo a Forrester” es uno de los casos más escandalosos, tiene mil y un ingredientes para que hubiera sido una de las películas del año 2000, y está desaprovechada al máximo.

Es una especie de versión libre de lo que puede ser el encierro voluntario del autor de “El guardián entre el centeno” J. D. Salinger, y vale que sea ficticia, pero Salinger no vive en el Bronx con los negratas enfrente de una cancha de baloncesto, es un señorito de Manhattan y cuando se marchó de allí lo hizo a una urbanización de puta madre de New Hampshire. Y claro que se relacionó con chicos jóvenes, que incluso entraron en su casa, pero fueron con los de un colegio privado del barrio rico donde vive, y no con la pandilla macarra de Dennis Rodman.

Todo este mensaje casposo de las relaciones y amistades intergeneracionales, interétnicas e interclasistas en la que se empeña Van Sant, tira por la borda lo que debería haber sido una película sobre la literatura de verdad… o sobre el baloncesto, pero no sobre mil cosas. Mejor un tema y bien, que no seis y mal. Eso como si a Peter Weir en “El club de los poetas muerto” le hubiese dado por hablar del apartheid.

Una pena, pero de las de verdad.

Nota: 5,7.
vircenguetorix
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow