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Voto de irian hallstatt:
8
Drama. Comedia Comedia dramática sobre una joven taiwanesa que duda entre si le gustan los chicos o las chicas. Ker-rou y Yueh-chen son dos amigas del instituto que a sus 17 años están descubriendo las sensaciones propias de la adolescencia. Ke-rou trata de actuar como mensajera de su amiga con un chico que le gusta, pero con el paso del tiempo la joven comienza a dudar de su propia sexualidad, pues se da cuenta de que quizá sea lesbiana y esté enamorada de ella. (FILMAFFINITY) [+]
6 de julio de 2007
13 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
* “Blue Gate Crossing” es un drama adolescente, con algún desenfadado apunte de humor, y que pese a su tono afable toca temas de cierta gravedad.

* ¿Triángulo amoroso? Pudiera ser, pero todo se desenvuelve de forma circular. Los sentimientos de los tres protagonistas se lanzan en vano en pos del ser amado porque los afectos de este se dirigen a la persona que los vuelca sobre nosotros. Tan solo uno de ellos intenta salirse de la dinámica que él mismo ha provocado, aunque su movimiento suponga una dolorosa sacudida en el sentir de los otros dos.

* A primera vista, uno de los temas tratados en la película sería el de la homosexualidad, inclinación que una de las protagonistas parece aceptar, complaciéndose en ella, mientras goza de la cercanía del ser amado y de la burlona incertidumbre de si su amor será correspondido, pese a los pocos indicios que para ello tiene. Aniquiladas las esperanzas, su mundo y sus estimas se tambalean. Comienza a plantearse su naturaleza, y a verla por primera vez como un problema. Es interesante como el personaje de Meng Kerou acepta sin complicaciones la atracción que siente hacia su compañera y amiga mientras hay amor y esperanza, para acto seguido plantearse la anomalía de sus inclinaciones.



* Podemos reflexionar acerca de otros asuntos respecto a las relaciones. Sumidos ya en la situación generada se muestra tanto el egoísmo de la falta como de la plenitud de sentimientos. “¿Qué estás haciendo?” pregunta Meng Kerou, “Persiguiéndote” contesta Zhang Shihao. Así transcurre buena parte de esta historia, con los sentimientos de los protagonistas desbocados hacia de la persona que aman mientras esta les da la espalda; de forma inconsciente o deliberada, el daño que se infringe no es menos doloroso. Pero el amor es ciego: pisotea y no mires a quien. Es increíble los sufrimientos que se pueden provocar por puntuales, y en apariencia nimios accesos de vergüenza, rencor, o aturdimiento, por desánimo, o irritación. Los protagonistas se lanzan unos tras otros sin mirar alrededor, sin considerar nada ni a nadie, aunque también es cierto que, ebrios de amor o abatimiento, las consecuencias de nuestros actos son objeto de poca atención por nuestras mentes, a donde se nos sube el corazón. Y al final tenemos un plácido mundo juvenil que se tambalea, relaciones ideales que se derrumban, y una buena dosis de realidad para sacarnos a base de palos de la adolescencia.

* La película tiene un ritmo algo pausado, pero contrarrestado por unas interpretaciones cargadas de frescura y desparpajo. Naturalidad que me acerca los personajes, que me hace simpatizar con ellos, y no dar marcha atrás a la hora de aplaudir su trabajo.

* La historia deja cosas en el tintero, pero igual que estas chicas juegan a imaginar como serán sus vidas con el transcurso del tiempo, nosotros podemos hacer otro tanto.
irian hallstatt
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