Recientemente he cogido un hábito que espero sea contagioso: observar todo lo que pueda del nuevo cine alemán. Jan Fehse es un director aún desconocido, pero este trabajo será, seguramente un trampolín para aún mejores proyectos.
In jeder Sekunde es un drama en el que se cruzan las historias de sus personajes, como en Magnolia, como en 21 grams, como en tantos buenos filmes que se arriesgan por este modelo narrativo. Sin embargo, El filme alemán tiene, no solo actuaciones muy bien logradas y sencillas en su absoluta honestidad, sino la estructura desgarradora y aterradora de la vida misma. De ahí su título. A cada segundo la vida está en juego; se gana, se pierde; se conoce el amor de la vida; se frustra un gran romance. Un trabajo muy bien logrado en todos los puntos de vista, con los siempre notables Sebastian Koch y Wotan Wilke Möhring.