Estrellita Castro demuestra en "Suspiros de España" que nada tenía que envidiarle a Imperio Argentina en cuanto a gracia, ni en cuanto a personalidad ni en cuanto a talento musical aunque Imperio Argentina que también rodó en Alemania en estas mismas fechas se refiriera a Estrellita diciendo que fue una compañera que no tuvo la suerte de triunfar como ella. La Castro era una mujer de hondas creencias religiosas y que tuvo que luchar mucho para abrirse camino en el mundo del espectáculo. Sus memorias recogidas por Tico Medina no llegaron a publicarse ya que la muerte la sorprendió cuando las estaba escribiendo. Cantaba estupendamente cuando hizo esta película y sólo al final de su carrera decayó un poco su voz pero ella se lo tomaba incluso con sentido del humor. La cinta es una auténtica muestra de un cine popular donde todo es auténtico y pertenece a un tipo de cine que inyectaba algo de alegría a las gentes en una época donde las miserias y los dramas personales estaban a la orden del día. Benito Perojo consigue darle a la película un sabor ambiental agradable y usa a los mismos protagonistas que tenía "El barbero de Sevilla", Miguel Ligero y Roberto Rey que se muestran simpáticos y expresivos. Fue Perojo un cineasta que casi siempre le daba un aroma especial a sus realizaciones y que luego viajó a Argentina para trabajar allí con cierto entusiasmo. "Suspiros de España" conserva su interés y hoy en día es todo un documento emotivo por diversas razones. Agrada y posee un tono entre sentimental y risueño que está perfectamente controlado.