Este documental habla de la miseria que asola la economía, y lo traduce en un momento puntual, como es la crisis del 2.008, aportando claves de lo que sucedió hace más de diez años, claves interesante para evaluar una reflexión.

Quizá su parte más negativa se traduzca en un exceso de información, que hubiesen debido focalizar para que los datos estuvieran al alcance de un espectador mayoritario.

El empobrecimiento evidente de la sociedad y más en particular de las nuevas generaciones de jóvenes, que "habitan" con sueldos que no alcanzan; son aquellos mismos que hace algo más de una década, se les calificaba de manera peyorativa "mileuristas" y hoy serían considerados como auténticos afortunados.

En los bancos solo existe papel sin valor, que mañana puede perder su simbolismo, en el instante que esos grupos financieros que controlan la economía mundial, así lo decidan. No tenemos dinero... o lo que hemos considerado siempre dinero.

El documental es largo, pero de obligada visión para despertar conciencias de quien siente que lo sucedido no se produjo de manera natural.