Debe ser que esta edición no se estrena ni vende en China. Al gran enemigo de el hombre de hierro, el Mandarín, lo transformaron en Iron Man 3 en un pelele falso, un actor de tres al cuarto, que además vestía con ropas de Turquestán, alejado de aquella especie de Fu Manchú versión Marvel. Parafraseando la cancion de los Nikis, ni amenaza, ni amarilla. Supongo que Marvel no querría ofender a un mercado que adora sus filmes, así que transformó al villano en alguien que no era étnicamente chino, como si lo era el original.

Sin embargo, en el presente corto, que empieza con la misma idea de farsante, se pretende desfacer aquel estúpido entuerto y devolver al Mandarín su peligrosa y amenazante personalidad, por fin. Tendrá ello su extensión en la pantalla grande?

Y Ben Kingsley está soberbio, como siempre. Parece divertirse con el personaje. Cuanto habrá sido creación suya?