¡Vaya empanada mental tenía el guionista! Un hipnotizador consigue que su ayudante - una pobre chica esclavizada- pueda retomar vidas anteriores hasta la vida primordial ... que resulta ser una especie de reptil humanoide al estilo de "La criatura de la laguna negra" ¿No fue a clases de biología? ¿No sabe que descendemos de mamíferos y no de humanoides reptilianos? En fin ... Curiosamente, esto de la regresión mental, trayendo a la realidad seres antiguos ya lo investigó Ken Russell en los años 80 en el filme "Altered states", conocido por "Viaje alucinante al fondo de la mente", pero sin hipnotizadores.

Película cincuentera de serie B, con un hipnotizador charlatán que ejerce de "mad doctor", trabajando en un circo, que odia al mundo y desea carnalmente a su ayudante, a la que siempre tiene hipnotizada. Una serie de asesinatos terribles, relacionados con sus investigaciones, llevarán a un investigador científico y a un policía a marcarlo más de cerca, mientras un prócer de la prensa prefiere inflar la noticia para hacer caja y repartirse dividendos con el villano. Chester Morris se come la película como el repugnante hipnotizador de pelo engominado y bigotín a lo franquista, un ser amoral y sin escrúpulos, un gorrón que se apalanca en la casa de su benefactor. El científico se ve atraído por la ayudante, lo que enervará al villano.

El guión chirría, con situaciones previsibles, personajes estereotipados y un monstruo que ha envejecido fatal, recordando a los villanos de goma-eva de los Power Rangers y esa afición suya por matar parejitas en la playa le da un toque algo voyeur....

No tiene mucho más. Una del montón, En los 50 no todo eran obras de culto.