Curioso filme mexicano de monstruos, que se podría alinear con las secuelas sobre la momia egipcia de la Universal. Porque sí, parte de una historia inverosímil tan en boga en esos filmes de terror, con el hallazgo de una tumba cuya historia es trágica y una maldición que afectará a todos los implicados, generalmente con lazos familiares o de amistad. Aquí se cambia la pirámide egipcia por la azteca, pero la momia que aparece va igual de lenta que la de Lon Chaney, eso sí, sin vendas. Tenemos un científico demasiado ensimismado en sus teorías, capaz de poner en riesgo a sus seres queridos para probarlas.

Rodada en B/N , con una buena fotografía de interiores, jugando con las sombras en el interior de las pirámides. Quizás lo que aleja al filme de uno estadounidense de serie B es la presencia de un gángster enmascarado que tendrá más relevancia en la segunda parte del filme, pero que aquí es completamente absurdo e innecesario su concurso.

Como en las secuelas de La Momia de la Universal, aquí la momia azteca se llevará a la chica andando, arrastrando los pies pero para alcanzarla los protagonistas necesitarán ir en coche y a gran velocidad. Algo no cuadra.

Se puede ver si eres aficionado a las películas de monstruos clásicos. La momia azteca bien merece un rinconcito entre ellos.