"La venganza sangrienta de Aki" arranca contando una historia bastante extravagante sobre una proyeccionista de cine con sobrepeso y traumas varios que coquetea con un asesino en serie que está liado con su mejor amiga mientras sufre extrañas pesadillas y es perseguida por un niño fantasma. Poco a poco esta historia se va a tomar por culo y empieza un carrusel de escenas surrealistas cada vez más retorcidas con abundancia de sangre, apariciones espectrales, mutilaciones surtidas, sexo raro, lesbianismo sadomasoquista y chifladuras varias. De alguna manera, sin embargo, el espectáculo funciona y tiene una cierta capacidad de fascinación, en parte por una puesta en escena preciosista que contrasta con la brutalidad de algunas situaciones, y por lo sorprendente (aunque incomprensible) de gran parte de lo que va sucediendo. Además el ritmo no decae en ningún momento a partir de la mitad del metraje, pese a que las escenas que se suceden sean bastante incoherentes.

Buena en su peculiar estilo, si alguien se anima a verla mi consejo es que renuncie a seguir el argumento y se deje llevar por el ambiente de pesadilla surrealista hacia el que deriva el filme.

Para el que aprecie sobre todo una buena historia y un guión sólido, lo mejor es que ni lo intente.

Más en spoiler, donde destripo algunas de las escenas más bestias por si eres lo bastante morboso para saber más pero también lo bastante perezoso como para ahorrarte ver la peli.