Si bien se realizó en 2006, no fue hasta un año más tarde, en 2007, cuando todos pudimos ver el nuevo cortometraje de Pixar Animation Studios al acercarnos al cine a ver "Ratatouille", el segundo largometraje de Brad Bird para la compañía y, al menos para un servidor, el mejor de todos los que han salido de la factoría hasta la fecha. Lifted, o Abducido en su versión en castellano, supuso el debut en la dirección de Gary Rydstrom, un reconocido realizador de efectos de sonido que ha ganado nada menos que siete premios Oscar (por films tan diferentes como Terminator 2 o Titanic) y acumula 14 nominaciones. Una de ellas, por este trabajo, su primera realización animada, a la espera de que en 2012 estrene Newt.

Abducido es, sin embargo, el trabajo de alguien que sabe cómo hacer las cosas. Con casi cinco décadas a sus espaldas y nula experiencia en el tema, Rydstom tenía además la durísima labor de mejorar el anterior cortometraje para cines de Pixar, "El hombre orquesta", aunque también partía de la base de "Cars", lo último del estudio visto en cines, había dividido a la gente. Afortunadamente supo aprovecharse de todo para contarnos la historia de un alienígena que debía hacer un examen de abducción humana, metiéndose en más de un lío durante los cinco minutos que duraba el trabajo. Con una fantástica animación y un ritmazo de mil demonios, amén de una planificación perfecta (porque estirar una idea tan simple y hacerlo sin que haya bajones es todo un logro), "Abducido" se convertía sin dudarlo en una sorpresa, y en una muestra de que en esta vida con ideas claras se puede hacer cualquier cosa. Un ingeniero de sonido creando uno de los grandes cortos de Pixar, nada menos... ojalá con Newt las cosas vayan, sino mejor, al menos igual de bien.