"Polytechnique" es un raro ejemplo de cine bien hecho, de ese que aparece de la nada, sin ningún tipo de boom comercial y que, lamentablemente, acaba cayendo en el olvido. Reconstruyendo una historia real que tuvo lugar hace casi 20 años en Montreal (06/12/1989) en base a comentarios de varios supervivientes, Denis Villeneuve nos conduce por una ficción terriblemente dura, sincera, sin ningún tipo de florituras.

Así, seguimos la historia de un hombre que sin más entra en una escuela y aniquila a tantas mujeres como pilla por el camino. Poco a poco se nos cuenta, desde diferentes ángulos y puntos de vista, la razón de este comportamiento y el devenir de aquella masacre. Queda esperanza en la historia de algún superviviente, los personajes son creíbles, las interpretaciones correctas y, lo que más sorprende, es el pulcro blanco y negro, una fotografía muy cuidada que funciona a las mil maravillas. Villeneuve se descubre como un narrador serio, que con un poco más de experiencia podría dar el campanazo y convertirse en uno de los valores del cine canadiense. Tiene personalidad, sólo le queda pulirlo un poco. Quizá lo consiga con su próximo film, Incendies, fechado para el próximo 2010.