En primer lugar, he de aclarar que pese a su buena fama dentro de los círculos de la literatura de género, no he leído "El juego de Ender" de Orson Scott Card. Dicho esto, mi valoracion de la película que ha realizado Gavin Hood se basa estrictamente en sus valores como obra cinematográfica. Y en este punto puedo hablar de un trabajo realizado con corrección, sin despuntar en casi ningún momento, pero tampoco molestar.

Sin embargo hay algo en "El juego de Ender" que le juega en contra y es la forma en la que está organizada la historia, algo que probablemente sea similar en el libro pero que ahí, al permitir a cualquier persona marcar un ritmo de lectura, amén de no tener las limitaciones de tiempo de una película comercial, no debería ser tan problemático. Porque la estructura jerárquica es la de un videojuego al uso: empezamos en el nivel uno y tras cada fase subimos al siguiente, avanzamos hasta el jefe final. Créditos y epílogo, de haberlo, tendiendo un hilo -o no- hacia lo que pueda estar por venir. En este sentido tenemos niveles claramente diferenciados pero lo que ocurre entre ellos es casi anecdótico, lo cual es -y aquí ya hablo de supuestos- un síntoma de que los productores han metido tijera y han decidido que con dos horas de acción, la cosa iba servida. Da la sensación de que la película que dirigió Hood duraba, como poco, media hora más.

No falta tanto desarrollo de personajes como una interacción real entre ellos. En su tercer acto, sin ir más lejos, hay un par de momentos en los que parecieran estar introduciendo elipsis sin hacerlo realmente, porque hay saltos bruscos que no se amoldan a la estructura de tiempo convencional. Esto se hace particularmente notorio en sus últimos quince minutos, y ahí no digo más, pero se resuelve un enigma y se muestra un cambio de personalidad apenas esbozándolo. Lo cual estaría bien si se apostase por la ambigüedad, pero no es el caso: todo está muy claro, pero es precipitado. Falta algo, y probablemente sea metraje. Por lo demás, sería ridículo negar que me lo he pasado bien viendo la película, que tiene un contenido social y político bastante interesante, capaz de crear debate (esto, y vuelto a tirar de sensaciones, imagino que en el libro estará mucho más -y mejor- desarrollado), y que a nivel técnico no se le pueden poner pegas de ningún tipo. La música de Steve Jablonsky es, por ejemplo, muy notable.

Así, "El juego de Ender" (película) es un trabajo estimable, un blockbuster que no cambia nada ni lo pretende, que quizá tenía potencial para ir mucho más lejos y se conforma con lograr lo minimo. Al menos lo consigue y supone un entretenimiento aceptable, carente de personalidad en un sentido estricto, pero suficientemente interesante como para recomendarse. De la ola de ciencia-ficción que nos ha llegado este año, con films como "The Last Days on Mars", "Europa One", "Oblivion", "After Earth", es desde luego de las más destacadas, aunque es probable que los fans del libro estén en desacuerdo con esta última afirmación.