Vale. Las leyendas son ciertas: Drácula 3000 es una mierda. Pero tenía que verlo por mis propios ojos… Iluso de mí. Estamos ante la que probablemente sea la peor película de la historia, y evidentemente la más horrible cinta con vampiros –esto declarado-. Es mala como peli de ciencia ficción, como película en general y como cualquier cosa. Es, realmente, una mierda. No se le pueden dar más vueltas.

Quizá podríamos hablar de los “actores”. Venga, vamos: Tenemos a Casper Van Dien, que oye campanas y no sabe donde. No contento con cargarse el mito vampírico con Revenant (Vampiros Modernos), aquí vuelve a intentarlo. Olé. Después, nos encontramos con una rubia sin personalidad llamada Erika Eleniak: Exvigilante de la playa, sosa… ¡al final es un...!; Coolio, el rapero que se cree cantante, que cada vez se mete en más pelis de mierda como esta, nos encontramos además con una mole sin carisma que responde al nombre de Tommy ’Tiny’ Lister, y haciendo de Drácula inter-espacial, a Langley Kirkwood. No, nadie lo conoce. ¡Y por supuesto no podía faltar el GRAN Udo Kier! Otro como Casper, con quien también salía en Revenant.

Las actuaciones son penosas, especialmente la de Coolio, y eso no es decir mucho. A Mina, la virginal doncella de la Obra Maestra de Bram Stroker, la han convertido aquí en una guarrilla de tres al cuarto. Y resulta que Casper es el tatatatatatataranieto del mítico Van Helsing, ¡Se llama así, y todo! ¡Se heredan los nombres!. Vergonzoso.

Pero no lo es tanto como la película en general, que como bloque es una vergüenza continua. Las escenas que presenciamos en la pantalla son patéticas, casi más que el guión que incluye más tacos que un capítulo sobrecargado de South Park. Todo es tan, tan vulgar, que da incluso apuro verla. Es el paso siguiente a la serie B. Es más, creo que no existe una calificación para esta producción Alemana/Sudáfricana. En realidad, al menos para mí, la Peor Película de la Historia. Si queréis sufrir, os doy el pésame y que la fuerza os acompañe…