No es el género donde más disfruto a Billy Wilder. La comedia es lo suyo, y lo demuestra al principio, en varios pasajes de humor que hay, a pesar de que la cinta en general es un drama. Valoro positivamente la originalidad del cómputo del metraje, y el realismo excesivo, pero no me hace sentir. No provoca, más allá de lo bonita de la mansión y lúgubre por fuera, y lo increíble que parece ese cuadro en el que se convierte la vida del guionista.
spoiler:
Al principio, pensé que se trataba de una paranoia del guionista, que veía visiones. Pero no, era real. Curioso el narcisismo de la ex actriz, y la cruda realidad de su presente. Interpretación maravillosa, la mejor de todas, con una cara de loca impresionante. Pero sin duda, el momento de la película es cuando nos desvela la historia de amor del mayordomo con ella, su primer marido, que ahora le dibuja un mundo de fantasía, el mundo que ella quisiera, con cartas de admiradores inexistentes, y una retahíla de embustes interminable. Como “la vida es bella”, pero al revés.
Pero lo siento, está muy lejos del 8.5 de media de mis almas gemelas.