Las segundas partes nunca fueron buenas. Un error garrafal, al menos para la película que nos ocupa. Esta secuela de Monstruos S.A. (2001) o precuela (como se la prefiera llamar) narra el momento en que Mike Wazowski y James P. Sullivan alias Sully se conocieron en la universidad. La Monstruos University. Dirigida por Dan Scanlon, nuevo en esto del terreno del largometraje. Hace siete años dirigió el corto Mate y la Luz Fantasma. Por mi parte me lo he pasado genial. Muy divertida, con algun momento dramático, oscuro, pero en general abunda el humor. Las voces en español se mantienen las mismas que la anterior, a Mike le pone voz José Mota y a Sully el señor Santiago Segura. Siendo sincero, cuando supe del proyecto de la primera y me enteré de quiénes pondrian las voces, me eché las manos a la cabeza, pero una vez vista me encantó. En versión original son Billy Crystal y John Goodman respectivamente, que repiten en la segunda parte, obviamente. Aquí los tienes familiarizados, y encima con algun voz nueva, Nathan Fillion en la versión inglesa (que gracias a la serie Castle goza del éxito) y en español con la misma voz de doblaje que tiene en la mencionada serie, el gran Ivan Muelas (podríamos decir la ex voz española de Will Smith). Yo creo que a los críos les gustará, bueno y a los no tan niños, la adorarán. Se lo pasarán muy bien con las aventuras de Mike y Sully en la universidad. Como si de los humanos se tratase, van a hermandades, tienen que entrar en competiciones para ver quién es más asustador. El reto del film es conocer su resultado. Atentos a los créditos finales y aguantad hasta el final de estos, ya que hay una secuencia cortita, pero graciosa con un personaje que aparece bien empezada la película.
La animación alcanza unas cotas muy altas en este film, planos que parecen de verdad, el agua de la piscina, ese lago que aparece en una secuencia, ese bosque, el cielo de noche. Lo que sigue, de alguna manera, fallando es la cara humana, aunque por las pocas escenas en la que sale un humano, se le llega a perdonar.
La banda sonora vuelve a ser compuesta, como en la cinta original, por el veterano Randy Newman. Nada que objetar por mi parte. Totalmente correcta.
Así que, me nota final es de diez. Se la merece.