Genial adaptación de la caricatura 'Don Fulgencio', de Lino Palacio, de la mano del inolvidable comediante Enrique Serrano (padre de la gran actriz Tina Serrano), cuyo papel del hombre que no tuvo infancia, es memorable.
Desfilan todos los personajes de la tira, entre ellos los monosilábicos Radragaz y Fernéndez.
Las ocurrencias de este hombre grande con alma de inocente niño, en los líos que se mete por su espíritu infantil y como se desenvuelve, hacen pasar 75 minutos de risa y diversión.
A pesar de ser un film con más de 70 años, su gracia se mantiene imperecedera, y es un eslabón valioso de los magníficos años dorados del cine argentino. Cine que sabía hacer dramas, adaptaciones de grandes novelas y también excelentes comedias, de la mano de gigantes como Luis Sandrini, Pepe Arias, Pepe Iglesias el Zorro, Niní Marshall, Mirtha Legrand o el nombrado Enrique Serrano.
Se recomienda para todo aquel que tenga alma de niño.

Nota: 10 (diez)