La idea, a priori puede parecer una simpática apuesta por un thriller de aventuras en Alaska, pero acaba degenerando en un culebrón que mezcla churras con merinas y que va avanzando a base de lagunas en el guión y continuos giros tramposos.
Dos hermanos en apuros económicos, deciden fingir, junto a la novia de un de ellos, la desaparición del mayor en la montaña nevada, para aparecer milagrosamente al cabo de los días y vender la historia para hacer una película. Obviamente, la broma se les va de las manos y el chaval se pierde de verdad. Luego comento más en spoiler. Pero la cinta no pasa de un teleflm sin pretensiones, al que se le ven demasiado las costuras del guión.

Sobre el reparto, ni fu ni fa. Jason Momoa figura el primero, pero sale como cinco minutos en toda la película, repartidos en tres escenas donde hace de macarra violento que reparte estopa. Del resto de chavales, solo reconozco al que desaparece, porque era el hijo mayor de la insoportable familia Mason en "Falling Skies"