Estrenada casi, casi a la par que Grimm, parece que ahora la oleada de las modas nos trae distintas formas de utilizar el mundo de los cuentos de hadas para crear series de tv que mezclan con distinta fórmula éstos con la vida real. Mientras que en Grimm han elegido la combinación: cazadores de monstruos-policía-personajes de cuento, en esta han optado por mostrar paralelamente la supuesta existencia de un mundo alternativo poblado de personajes de cuento, con la realidad de una joven que se topa con la obligación de tener que desempeñar un papel relevante en el mundo de las hadas, las brujas y, los monstruos. Personalmente me gusta mucho más esta que la de Grimm que, se agota en su propio episodio piloto ya que, una vez visto, francamente, te quita las ganas de seguir viendo que pasa... En Érase una vez..., pasa justo al revés. Sorprendida por el curioso planteamiento planteado en el primer episodio, sí tienes ganas de ver qué camino llevarán los personajes que, impacto causará en Emma darse cuenta de su nueva misión como salvadora de finales felices y; qué ocurrirá con su hijo. No sé si la idea se agotará por culpa de un desarrollo patoso o, si por el contrario, crecerá capítulo a capítulo pero, al menos, me han quedado ganas de comprobarlo. Cosa que como he dicho, ni de lejos me sucedió con Grimm, a la que considero faliida desde su propio nacimiento.