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Estados Unidos Estados Unidos · Raccoon City
Voto de Maldito Bastardo:
8
Drama. Comedia. Romance A partir del momento en que una pareja decide adoptar a un gato, su perspectiva de la vida cambia tan radicalmente que altera su percepción del tiempo y del espacio, y llega a poner a prueba su amor y su confianza. (FILMAFFINITY)
12 de enero de 2012
40 de 50 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si está película estuviera firmada por David Lynch sería considerada una obra maestra y reivindicada cada cinco micro-segundos en cualquier circuito y ambiente gafapastil.

Si fuera de un director tailandés seria una joya del cine contemporáneo y multipremiada en cualquier Festival…

Pero como es de Miranda July, una mujer que no es oriental e hija de Sundance, se merece la indiferencia o el insulto.

Es curioso que esos lyncheros y gafapastas, adictos al cine oriental, que se llevan las manos a la cabeza indignados cada vez que Carlos Boyero fulmina sus amadas obras con similares improperios y expresiones recurrentes hayan utilizado esas mismas frases, argumentos e insultos para ‘pasar por la piedra’ a “El futuro” de Miranda July.

Es meritorio que te lancen rosas y que te tilden de ser parte de lo peor del año en algunas publicaciones norteamericanas. Esta película ha sido calificada de ridícula, vergonzosa, de diálogos bobalicones y estúpidos, absurda, incrédula, aburrida, tonta, fallida, sin gracia, alargada hasta el bostezo, excéntrica, pretendidamente esnob y patética… En definitiva, una película de gente rara a la que es mejor perder de vista…

Y es que sencillamente la película de la directora de “Tú, yo y todos los demás” trata sobre el inmovilismo de la vida, las personas y también del cine. “El futuro” es la proyección de Miranda July donde plasmar sus frustraciones, temores, miedos, bloqueos artísticos y buscar soluciones futuras. No las encuentra… aunque todo ese proceso es en sí mismo una obra, admirable o discutible, hiriente o profunda, ridícula o patética. Ella misma se ve incapaz de imitar a esas bailarinas que cuelgan sus vídeos en youtube como carta egocéntrica de presentación y vehículo perfecto para mostrar el ‘ombligo’ al resto del mundo. Ni siquiera encuentra su propio estilo, todo es ridículo e impostado. Lo fácil, como ejerce el personaje que interpreta ella misma, sería acabar siendo un objeto… ceder su independencia, no pensar y simplemente vivir el futuro en un barrio residencial y ser una ama de casa burguesa con marido e hija viendo pasar los años y el futuro de los demás…

Da lo mismo que te perseguía una camiseta XXL bananera para que encuentres en tu interior una nueva manera de desarrollar tu creatividad aunque no te entienda nada ni nadie o que te rías de esos seres que se creen arty-stas contemporáneos, ya sean por sus vídeos que cuelgan en youtube o sus películas independientes. Tu futuro es simplemente el mismo que ellos: indeterminado, tal vez cruel e impuesto por el mundo que orbita alrededor… por muchas señales que intentes buscar y retener… el tiempo corre para todos por igual. Asómate por la ventana y grita porque nadie en este mundo responderá a tu llamada. Bueno, tal vez esa proyección fatalista de la cineasta a la que pone voz y seguramente también articule sus patitas de peluche… llamada Paw-Paw.
Maldito Bastardo
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