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Voto de Berbizier:
6
8,0
29.071
Drama. Bélico
Basada en hechos reales ocurridos en 1905, narra como la tripulación del acorazado Príncipe Potemkin de Táurida se cansan del tratamiento vejatorio e injusto de los oficiales. El detonante de la situación es la carne podrida que éstos quieren que los marineros se coman. Con este motín comienza el reguero revolucionario por Odesa y toda Rusia. (FILMAFFINITY)
6 de mayo de 2009
24 de 37 usuarios han encontrado esta crítica útil
Combinando las listas de las películas más importantes de la Historia según los más expertos, he obtenido una lista de listas con 100 títulos. Ordenadas por año, dejo aquí mi breve comentario completamente subjetivo que irá siempre en spoiler. He dividido las cien elegidas en cinco grandes grupos, de una a cinco estrellas, siendo cinco el máximo, que corresponde a las más citadas.
Película: El Acorazado Potemkin (1925)
Grupo: (* * *)
Película: El Acorazado Potemkin (1925)
Grupo: (* * *)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Esta película figurará en cualquier libro de Historia del Cine que se haya escrito y que se escribirá por motivos obvios. Yo he leído un montón y está en todos, siempre con fotos y un amplio espacio dedicado a su influencia.
Yo no creo que la trayectoria del Cine, que sin duda fue sacudido por la proa del Potemkin en su día, haya seguido el camino trazado por esta película. No soy historiador, se trata de una simple intuición fundada en la experiencia de haber visto centenares, quizás miles de películas a lo largo de mi vida. Créanme, el Potemkin va por un lado y el Cine fue por otro.
La subordinación absoluta a la idea del montaje, más que al montaje en sí, llega a ser cansina. Se supone, según el propio Eisenstein proclama, que el montaje es una herramienta formal para expresar ideas, pero viendo “El acorazado Potemkin” tengo la impresión de que esa herramienta esclaviza y acaba por sepultar las ideas –que, por cierto, no son nada sutiles- y de paso las imágenes. Eso no me sucede con “Intolerancia”, por ejemplo. Voy a decir lo peor que se puede decir de esta película, sin duda: como obra unitaria es un fracaso pues se basa en la continua repetición de la misma estructura “in crescendo” para cada escena. Si fuera una sinfonía, la calidad de construcción de “El acorazado Potemkin” no estaría a la altura ni de un primer año de Conservatorio. Para una obra tan formalista y que pretende ser casi arquitectónica, esto es un insulto en toda regla.
Eso no obsta para reconocer que hay escenas –la rebelión de los marineros en el acorazado o las escalinatas, por supuesto- de indiscutible virtuosismo y que funcionan de manera independiente al resto de la película.
Yo no creo que la trayectoria del Cine, que sin duda fue sacudido por la proa del Potemkin en su día, haya seguido el camino trazado por esta película. No soy historiador, se trata de una simple intuición fundada en la experiencia de haber visto centenares, quizás miles de películas a lo largo de mi vida. Créanme, el Potemkin va por un lado y el Cine fue por otro.
La subordinación absoluta a la idea del montaje, más que al montaje en sí, llega a ser cansina. Se supone, según el propio Eisenstein proclama, que el montaje es una herramienta formal para expresar ideas, pero viendo “El acorazado Potemkin” tengo la impresión de que esa herramienta esclaviza y acaba por sepultar las ideas –que, por cierto, no son nada sutiles- y de paso las imágenes. Eso no me sucede con “Intolerancia”, por ejemplo. Voy a decir lo peor que se puede decir de esta película, sin duda: como obra unitaria es un fracaso pues se basa en la continua repetición de la misma estructura “in crescendo” para cada escena. Si fuera una sinfonía, la calidad de construcción de “El acorazado Potemkin” no estaría a la altura ni de un primer año de Conservatorio. Para una obra tan formalista y que pretende ser casi arquitectónica, esto es un insulto en toda regla.
Eso no obsta para reconocer que hay escenas –la rebelión de los marineros en el acorazado o las escalinatas, por supuesto- de indiscutible virtuosismo y que funcionan de manera independiente al resto de la película.