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Voto de Nefarivs:
6
2020
Verónica Fernández (Creadora), Jesús Font ...
5,9
1.204
Serie de TV. Drama
Serie de TV (2020). 13 episodios. Samuel Caronte, ex policía que acaba de cumplir condena por un asesinato que no cometió, al salir de prisión quiere comenzar una nueva vida y olvidar su pasado. Durante su estancia en la cárcel ha aprovechado para estudiar y convertirse en un abogado penalista. Además, con su experiencia como policía, está decidido a impartir justicia y defender a aquellos que han pasado por su situación. (FILMAFFINITY)
18 de mayo de 2020
9 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Voy por el capítulo 7, así que esta crítica se basa en las impresiones de dichos capítulos. Esta crítica podrá ser modificada según avance la serie.
Sin entrar en detalles, la pregunta clave es si la recomiendo: Indudablemente, SÍ.
Es un producto nacional de calidad, con un aspecto novedoso y fresco...pero desaprovechado.
Las actuaciones son correctas, y se nota que en el apartado técnico, los productos nacionales van mejorando a pasos agigantados. Atrás quedaron ya esas tetas gratuitas que lastraban a buena parte de nuestras series.
Pero como bien digo, y espero que algún guionista aprecie, se nota la corrección política y la tendencia marcada, buscando siempre el aplauso fácil, el querer agradar, llegando a caer en enormes contradicciones.
Las detallo en spolier (no desvelo nada que no digan los tráilers o la sinopsis).
Sin entrar en detalles, la pregunta clave es si la recomiendo: Indudablemente, SÍ.
Es un producto nacional de calidad, con un aspecto novedoso y fresco...pero desaprovechado.
Las actuaciones son correctas, y se nota que en el apartado técnico, los productos nacionales van mejorando a pasos agigantados. Atrás quedaron ya esas tetas gratuitas que lastraban a buena parte de nuestras series.
Pero como bien digo, y espero que algún guionista aprecie, se nota la corrección política y la tendencia marcada, buscando siempre el aplauso fácil, el querer agradar, llegando a caer en enormes contradicciones.
Las detallo en spolier (no desvelo nada que no digan los tráilers o la sinopsis).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Tenemos como protagonista a Caronte, un expolicía drogata que tras pasar 10 años en prisión sale reconvertido en no solo en un licenciado en derecho, sino en un abogado (todos sabemos que los presos pueden formarse y sacarse una carrera, pero colegiarse es diferente). En principio esta apuesta parece arriesgada, y me gusta, ya que presenta un punto de controversia en nuestra sociedad. ¿La redención es posible? ¿La cárcel ha de ser solo un sistema punitivo, o como en este caso, reinserta al reo en la sociedad?
Sin embargo, resulta que fue condenado por un crimen que no cometió, y lo que da lugar a la trama de corrupción, destruye esa premisa inicial. Caronte no tiene reforma ninguna, pues nunca fue malo.
Simplemente, tras una mala racha con las drogas cometió algunos errores. Y tras pasar ese trago donde lo vemos arrepentido, se acaba también la parte controvertida con las drogas. Eso si, con respecto a las drogas, si se puede cambiar.
Ahora viene la parte negativa: Todo esto comienza a ser demasiado políticamente correcto, en el capítulo 7, (aqui si hay ligero spoiler) cuando un juez de malos tratos, resulta que: tiene que tener un motivo personal, para no dejarse llevar por los sentimientos y juzgar únicamente las pruebas. A tomar por culo la objetividad, el juez tiene que dictar la sentencia que está de moda aún que eso signifique violar los derechos fundamentales del presunto. Peor aún, luego al final del capítulo vemos que el maltratador no tiene remedio posible (un maltratador siempre será un maltratador) asi que ya con eso está justificado, y no solo eso, sino que con eso se pone en juicio todos los casos que ha llevado. Viva la objetividad. Porque claro,
Hubiera sido mucho más interesante otra perspectiva, como por ejemplo que al final del capítulo no hubiera pasado nada, demostrando que el juez puede ser estricto y aun así justo. Pero no, están justificando un chantaje a un juez, y todo lo hacen y está justificado porque al final del capítulo el maltratador intenta matarla. Y eso es jugar con las perspectivas. Nosotros sabemos que sí ha maltrato porque está en el guión, aunque no veamos la acción. Pero un Juez no puede permitirse esas licencias. La hermana que ha despreciado a Caronte todo el rato, de repente, es una Santa, pese a haber estado la primera parte de la serie, comportándose fatal con su hermano.
Por eso, me gustaría pedirles a los guionistas, que se arriesgaran más, y dejaran la senda de lo políticamente correcto. Un ejemplo de esto que digo podría ser la película Crash, se juega con esas persperctivas y ni los buenos son tan buenos, ni los malos tan malos.
¿Os imagináis por ejemplo que el hombre fuera inocente y que quien le dio la paliza fuera su amante? ¿y que con esto el juez ponga al marido en busca y captura. Sería plausible, ya que la hija no vio nada. Es solo un ejemplo de como podría haber derivado el capítulo.
Y que en una serie que no olvidemos es de abogados, faltar de tal manera al procedimiento, o meter las ideas de que un juez es un prevaricador solo porque se está divorciando, eso se carga todo el planteamiento inicial, pues ya no podrá verse de forma objetiva, destruyendo el trabajo de los capítulos anteriores en pos del aplauso fácil.
No falta tampoco la extranjera explotada o el amigo gay interracial, que ya es un obligado de las series. Y no me molesta ninguno de los 2, es más, el drama de la extranjera, por desgracia, en barrios como el que sucede es bastante más común de lo que debería. Pero sin embargo, que el compañero sea gay e interracial, no le aporta nada al personaje como desarrollo, simplemente está porque tiene que estar. Lo veo innecesario. Una manera de justificar la nueva agenda social. Espero que a estas alturas, la gente recuerde que SI recomiendo la serie y que este no me parece un punto para no verla, antes de comenzar a llamarme de todo. Es más, es un detalle menor, que no me preocupa, veo mucho peor las contradicciones arriba descritas.
Sin embargo, resulta que fue condenado por un crimen que no cometió, y lo que da lugar a la trama de corrupción, destruye esa premisa inicial. Caronte no tiene reforma ninguna, pues nunca fue malo.
Simplemente, tras una mala racha con las drogas cometió algunos errores. Y tras pasar ese trago donde lo vemos arrepentido, se acaba también la parte controvertida con las drogas. Eso si, con respecto a las drogas, si se puede cambiar.
Ahora viene la parte negativa: Todo esto comienza a ser demasiado políticamente correcto, en el capítulo 7, (aqui si hay ligero spoiler) cuando un juez de malos tratos, resulta que: tiene que tener un motivo personal, para no dejarse llevar por los sentimientos y juzgar únicamente las pruebas. A tomar por culo la objetividad, el juez tiene que dictar la sentencia que está de moda aún que eso signifique violar los derechos fundamentales del presunto. Peor aún, luego al final del capítulo vemos que el maltratador no tiene remedio posible (un maltratador siempre será un maltratador) asi que ya con eso está justificado, y no solo eso, sino que con eso se pone en juicio todos los casos que ha llevado. Viva la objetividad. Porque claro,
Hubiera sido mucho más interesante otra perspectiva, como por ejemplo que al final del capítulo no hubiera pasado nada, demostrando que el juez puede ser estricto y aun así justo. Pero no, están justificando un chantaje a un juez, y todo lo hacen y está justificado porque al final del capítulo el maltratador intenta matarla. Y eso es jugar con las perspectivas. Nosotros sabemos que sí ha maltrato porque está en el guión, aunque no veamos la acción. Pero un Juez no puede permitirse esas licencias. La hermana que ha despreciado a Caronte todo el rato, de repente, es una Santa, pese a haber estado la primera parte de la serie, comportándose fatal con su hermano.
Por eso, me gustaría pedirles a los guionistas, que se arriesgaran más, y dejaran la senda de lo políticamente correcto. Un ejemplo de esto que digo podría ser la película Crash, se juega con esas persperctivas y ni los buenos son tan buenos, ni los malos tan malos.
¿Os imagináis por ejemplo que el hombre fuera inocente y que quien le dio la paliza fuera su amante? ¿y que con esto el juez ponga al marido en busca y captura. Sería plausible, ya que la hija no vio nada. Es solo un ejemplo de como podría haber derivado el capítulo.
Y que en una serie que no olvidemos es de abogados, faltar de tal manera al procedimiento, o meter las ideas de que un juez es un prevaricador solo porque se está divorciando, eso se carga todo el planteamiento inicial, pues ya no podrá verse de forma objetiva, destruyendo el trabajo de los capítulos anteriores en pos del aplauso fácil.
No falta tampoco la extranjera explotada o el amigo gay interracial, que ya es un obligado de las series. Y no me molesta ninguno de los 2, es más, el drama de la extranjera, por desgracia, en barrios como el que sucede es bastante más común de lo que debería. Pero sin embargo, que el compañero sea gay e interracial, no le aporta nada al personaje como desarrollo, simplemente está porque tiene que estar. Lo veo innecesario. Una manera de justificar la nueva agenda social. Espero que a estas alturas, la gente recuerde que SI recomiendo la serie y que este no me parece un punto para no verla, antes de comenzar a llamarme de todo. Es más, es un detalle menor, que no me preocupa, veo mucho peor las contradicciones arriba descritas.