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España España · Oviedo
Voto de Gould:
5
Drama Hastiada de los abusos que vienen cometiendo los directivos de la Lotería de Louisiana y sus compinches, la señora Blanche Brunot (Helen Westley), decide contratar a un abogado que les defienda. Para el caso llega John Reynolds (John Wayne), pero la dama quedará muy confundida al verle llegar con Julie Mirbeau (Ona Munson), la hija del general Anatole Mirbeau (Henry Stephenson), propietario de la cuestionada lotería. ¿El abogado, será ... [+]
9 de mayo de 2018
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La mezcla de géneros era una de las más originales características del director norteamericano Bernard Vorhaus, afincado definitivamente en Inglaterra, en la que ya había trabajado en los años 30, huyendo de la caza de brujas del senador McCarthy –fue uno de los autores citados por Edward Dmytryk y Frank Tuttle en sus declaraciones ante el Comité-. Vorhaus había –entre otras cosas- hecho campaña a favor de la República durante la guerra civil española algo que en el ambiente estadounidense de guerra fría implicaba serios problemas para trabajar en la industria cinematográfica.

Sin embargo, pese a que el planteamiento de partida es bastante original, poco aporta esta película a una filmografía irregular pero llena de títulos interesantes como la de Vorhaus. Aquí nos encontramos con un western de juego y loterías, de argumento ligeramente previsible, que se desarrolla en Nueva Orleans y donde el abogado John Reynolds, interpretado por John Wayne, trata de desentrañar los tejemanejes de un negocio de lotería y del robo al que se somete a los ganadores. Lo más interesante es justamente ese carácter híbrido en el que se mezclan géneros cinematográficos: western, cine negro, cine de juicios y hasta cine de catástrofes, lamentablemente al servicio de una historia algo simplona de serie B, que no acaba de funcionar por las debilidades del guion, trufado de personajes sin relieve y un final atropellado e insatisfactorio.

La película, en todo caso, sirve para ilustrar algunos de los recovecos más desconocidos de la carrera del gran “Duke” con el que Vorhaus rodó un año antes una película infinitamente mejor “Three faces west” (Rutas infernales). Aquí, la verdad sea dicha, no da lo mejor de sí en el papel de fiscal, acompañado por una estridente Ona Munson, empeñada en imitar a la, por aquel momento, gran estrella Miriam Hopkins.
Gould
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