21 de enero de 2007
13 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como dice el amigo Adriá, sí, qué bonita es Mallorca. Eso es precisamente lo que pensaba mientras miraba esta soporífera película que casi me hace abandonar el cine.. Madre mía, poco qué comentar. Sí la indignación de que se le de un protagonista a una actriz de medio pelo como Lucía Jiménez, monocara, siempre el mismo careto pase lo que pase. Ya sea miedo, angustia, tristeza o desesperación, su mirada siempre refleja lo mismo. Con la de actrices brillantes y en la sombra que hay por ahí, a la espera de una oportunidad, y que sacarían el doble de partido a este papel... Qué injusto. El guión, una mediocridad hyper masticada que va a trompicones. No me gustó nada
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?