Esta bien podría una de las cientos de cientos de películas que han pasado ni pena ni gloria por el cine mudo. Aunque hay bastante cine mudo que podemos disfrutar a día de hoy, se valora que se ha perdido un 90% del cine mudo. Es por eso que esta película podría ser una de esas que no tiene mucho interés en conservarse cuando apareció el cine sonoro.

Es una película que sí, entretiene, una historia normalita sobre las desvivencias de unas mujeres del espectáculo de como una sube, la otra se mantiene, la una se le va la olla y la otra la intenta que aterrice. Poco más, es como el cine de Antena 3 del domingo al mediodía.

Que ojo, no está mal. Interpretaciones correctas.

Una cosa que me llamó la atención es cuando se suben al bus y hacen como que está en la calle, ya que se ve de fondo una pantalla que se ve el tráfico. Creo que es la primera película que veo esta clase de efecto tan utilizado en décadas posteriores. Aunque se nota muchísimo, no deja de ser curioso.