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Voto de Klara:
4
5,3
41
Comedia. Romance
Russell Ward, un viejo productor de Broadway, no acaba de ponerse de acuerdo con el autor de la obra que se propone financiar. Su secretaria, les sugiere que cambien el argumento: en lugar de que el protagonista sea un hombre mayor que trata de seducir a una joven, lo sea una muchacha que se enamora de un hombre joven. (FILMAFFINITY)
18 de agosto de 2012
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una comedia clásica sofisticada, adaptación de una obra de teatro,lo cual se nota un poco demasiado, pues los cinco personajes principales copan las escenas y no hay secundarios de peso ni otras tramas que se contrapongan a la principal. En cuanto al formato, es correcto, muy de la época, agradable de ver; desde luego no es una comedia alocada, consigue sacar sonrisas pero no carcajadas. Clark Gable hace un papel muy interesante, fuera de sus habituales guiones de aventurero y hombre de acción. El y su partenaire, Carrol Baker, son lo mejor de la película, los personajes mejor construidos; el resto tienen mucho menos interés pues son meros clichés típicos de la comedia sofisticada que solo están ahí para aportar giros de guión previsibles.
En cuanto al contenido, me ha decepcionado mucho. Actualmente hablamos de la excesiva corrección política que muestran determinados productos culturales en su afán de no molestar a según qué sectores de la población. Por lo que se ve, esto no es nuevo, pues se nota que esta película está calculada para no ofender a la moral de la clase media alta bienpensante. Se plantea una historia de amor interesante (y de forma menos tópica que otros filmes) entre un productor teatral y su asistente/secretaria, pero la trama va perdiendo mucho fuelle a medida que avanza el metraje, al forzar el guión y los personajes a llegar a un final acorde con la moral conservadora del momento muy poco creible y que no encaja para nada con los la forma de ser de la pareja protagonista. Además, para ser una comedia ligera sofisticada, el argumento es muy simple, otras de la misma época son capaces de plantear un desarrollo argumental más rico, con más subtramas y con más niveles de significado.
Recomendable para pasar un rato agradable sin más si se es fan de este tipo de cine.
En cuanto al contenido, me ha decepcionado mucho. Actualmente hablamos de la excesiva corrección política que muestran determinados productos culturales en su afán de no molestar a según qué sectores de la población. Por lo que se ve, esto no es nuevo, pues se nota que esta película está calculada para no ofender a la moral de la clase media alta bienpensante. Se plantea una historia de amor interesante (y de forma menos tópica que otros filmes) entre un productor teatral y su asistente/secretaria, pero la trama va perdiendo mucho fuelle a medida que avanza el metraje, al forzar el guión y los personajes a llegar a un final acorde con la moral conservadora del momento muy poco creible y que no encaja para nada con los la forma de ser de la pareja protagonista. Además, para ser una comedia ligera sofisticada, el argumento es muy simple, otras de la misma época son capaces de plantear un desarrollo argumental más rico, con más subtramas y con más niveles de significado.
Recomendable para pasar un rato agradable sin más si se es fan de este tipo de cine.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Clark Gable, productor teatral divorciado en plena madurez, no es capaz de aceptar su edad... pero, a la vez, incongruentemente, se siente un poco escandalizado cuando su joven asistente le plantea que está enamorada de él; no concibe que una muchacha se enamore de un "viejo" como él. La joven, que además es actriz (!), acaba protagonizando la obra que él produce (con gran éxito), y le reitera su deseo de casarse con él una y otra vez. Lamentablemente, a partir de aquí, en lugar de desarrollar una trama dirigida a personas adultas verdaderamente sofisticadas, que haga patente el conflicto entre los deseos y sentimientos de los protagonistas (ambos están libres, aunque ella tiene a un pagafantas que pulula cerca) y el miedo al qué dirán, se meten con calzador las figuras de la ex mujer de él y el moscón de ella y la historia se infantiliza a marchas forzadas. Estos dos perros del hortelano no aportan nada salvo volver el argumento banal y previsible: movidos únicamente por la envidia, su misión en la película no es otra que arruinar una historia de amor interesante pero escandalosa para la moral pacata de la época. Nadie se puede creer que Clark Gable vuelva con una estúpida de la que sabe que lo único que le interesa de él es cobrar el cuantioso cheque de la pensión (el rollo final ese de que es una buena mujer porque lo invertía en secreto en la empresa de él no se lo traga nadie, es una morcilla de guión para salvarle la cara a una aprovechada que no quiere que su ex se case para que no le baje la pensión). Ni tampoco nadie se cree que Carroll Baker se interese por su compañero de academia teatral, un idiota envidioso que no tiene ni una sola cualidad positiva.
En cuanto al último personaje, el autor teatral alcoholizado y falto de inspiración que ya ha perdido la confianza en sí mismo, esta es la enésima peli en que lo veo y para lo único que vale aquí es para alcahuetear entre las parejas, punto, es topicazo puro.
Al final queda la moral burguesa conservadora intacta: los jóvenes con los jóvenes, los mayores con los mayores; la pareja de clase alta se vuelve a juntar, los menos adinerados tendrán que luchar por salir a flote, nada de atajar con "braguetazos"; el matrimonio es sagrado, no se rompe ni con divorcio de por medio... y las mujeres han de obedecer al marido aunque, como en el caso del pagafantas, este quiera enterrar en vida a su recien estrenada esposa en un pueblucho de Montana (porque, por supuesto, ni se plantea la "peligrosa" opción que la joven se quede soltera un tiempo para vivir la vida. El guión la malcasa deprisa y corriendo con su moscón acosador).
En cuanto al último personaje, el autor teatral alcoholizado y falto de inspiración que ya ha perdido la confianza en sí mismo, esta es la enésima peli en que lo veo y para lo único que vale aquí es para alcahuetear entre las parejas, punto, es topicazo puro.
Al final queda la moral burguesa conservadora intacta: los jóvenes con los jóvenes, los mayores con los mayores; la pareja de clase alta se vuelve a juntar, los menos adinerados tendrán que luchar por salir a flote, nada de atajar con "braguetazos"; el matrimonio es sagrado, no se rompe ni con divorcio de por medio... y las mujeres han de obedecer al marido aunque, como en el caso del pagafantas, este quiera enterrar en vida a su recien estrenada esposa en un pueblucho de Montana (porque, por supuesto, ni se plantea la "peligrosa" opción que la joven se quede soltera un tiempo para vivir la vida. El guión la malcasa deprisa y corriendo con su moscón acosador).