Para comenzar la natación es mi deporte favorito, así que al saber que este año se estreno una película que cuenta una historia que involucra a esta actividad, rápidamente acudí a verla, sin importarme las críticas o puntajes previos, desafortunadamente me encontré con un drama convencional.

Pues siempre las historias basadas en hechos reales suelen limitar a los directores en el guión, pero para esos casos debe estar el ingenio del director que debe ingeniárseles para mostrar su sello personal en la historia, un ejemplo claro de esto es la película brasilera Ciudad de Dios.

Ahora entrando a la película, estuvieron flojas las actuaciones de los jóvenes nadadores y ni que decir del antagonista, un total desastre en las pocas ocasiones que le toco entrar a escena. Los protagonistas, si pasaron con nota aprobatoria, peor no sobresaliente para un drama que por la historia contada debe conmoverte.

Dentro de lo rescatable esta el buen trabajo de cámaras que le daban a las tomas de piscina la emoción innata en este deporte.

Tampoco puedo decir que la película fue un fiasco porque no lo fue, estuvo de regular para arriba, quizás no supere a la popular Sociedad de los Poetas Muertos, como un film que transmite la relación entre unos chicos y su maestro.

Puntaje: 6.3