Tal vez este sea otro nombre, para este excepcional rodaje australiano que a pesar que llegó algo tarde a mi país (Perú), fue una opción diferente a la recargada cartelera comercial de estos últimos meses.

Lleno de gran tensión, el Proyecto de Alexandra, juega con el espectador cada minuto del film, quizá uno de sus defectos fue los momentos vacíos del film, interpretarse, como los momentos en silencio y reflexión de los personajes.

Con algunos elementos parecidos a Saw, la película logra atrapar al espectador, que en varios momentos no sabe que esperarse de la película. Créame, en la sala uno podía escuchar risas en un momento, y en otro expresiones de repulsión y asombro.

En general una gran filme, que quizá cayo en algunos errores en el momento de definir los tiempos, pero en si no deja de ser una gran opción para los fanáticos del género.